Irish Coffee son una institución dentro del hard rock setentero. El primer disco de la banda belga es considerado como una de las mejores obras de la época por los fans del género. Hablamos con William Souffreau, cantante, guitarrista y miembro fundador. Serán el plato fuerte de la jornada “50 years of Woodstock” que se celebrará el 14 de agosto como presentación del W Festival. No solo de música de los ochenta vive el hombre.
—¿Cómo era la música de The VooDoo, la primera versión de Irish Coffee, y quiénes eran sus miembros?
—Principalmente, tocábamos versiones de Deep Purple, Spirit, Led , Cream, Ten Years After, Beatles…. y nos teníamos que conformar con tocar cada semana en el mismo club “El Gringo”. Los miembros eran los mismos que en nuestro primer single Masterpiece /The Show. Después de eso, cambié a segundo guitarrista y encontramos un nuevo bajista para grabar el disco.
—¿Cómo era Bélgica a finales de los sesenta?
—En Bélgica teníamos que buscar la buena música, porque a las radios locales no les gustaba mucho el rock ‘n’ roll. Escuchábamos Radio Caroline e íbamos a Londres a comprar discos.
—¿Cuál eras tus influencias por aquellos días? ¿Cream? ¿Uriah Heep? ¿Deep Purple?
—Sí, mayormente esas bandas… pero también escuchaba algo de jazz-rock y blues. Tengo un punto de vista abierto hacia la música moderna. También creí con música clásica. Puedes sentir estas influencias en mis primeros trabajos en el álbum.
—La banda tiene muchos fans amantes del heavy metal y ha sido consideraba una influencia para el género. ¿Estás interesado en el metal?
—No soy un gran fan del metal, pero me gusta Motorhead. Los teloneamos con Joystick en Bélgica durante los ochenta.
—¿Por qué el nombre de Irish Coffe? Leí que fue vuestro manager el que cambió el nombre de la banda, ¿verdad?
—Sí y no nos gustaba, pero después de tantos años ya no nos importa… además un café con algo de crema ¡rockea!
—¿Cómo eran los conciertos de Irish Coffee en los setenta? Tocabais muchas versiones ¿verdad?
—Aquí en Bélgica, éramos una banda de culto, por eso teníamos que tocar también algunas versiones, pero elegimos buenos temas. Y ha todo el mundo le gustaba el sonido de las canciones, las tocábamos con la misma energía que las originales.
—¿Cómo fue la grabación del primer disco?
—Lo grabamos en cuatro días en un ocho pistas aquí en Bélgica. Sin demasiados trucos, pero con mucha energía por parte de los chicos. No tuvimos muchos regrabaciones, todo fue grabado en una toma, menos las voces y la guitarra principal. Muy inspirador.
—La última publicación de la banda fue el single “Witchy lady”, un tema bastante bueno. ¿Piensas que merecía mejor suerte?
—Eso creo, fue un punto de inflexión, teníamos un nuevo guitarrista solista y el tema se convirtió en algo más Blues rock. Todavía me gusta “I’m Hers”.
—En noviembre de 1974, hubo un accidente de coche y uno de los miembros de la banda murió y otro fue herido, lo que llevó al final del grupo. Aunque no estuviste en el accidente ¿cómo recuerdas esos días?
—Fueron días tristes, prefiero no comentar, lo siento.
—Después de esto, la banda reapareció con el nuevo nombre de Joystick y cambió de estilo musical, ahora con influencias del jazz rock y el funk. ¿Fue una forma de mantenerse al día o es que los miembros de la banda comenzasteis a interesaros en esta clase de música?
—Siempre he sido el escritor de nuestras canciones, pero ahora con Tony Boast y Raf Lenssens en la banda, tomamos otra dirección. Pero así fue más difícil conseguir un contrato que antes. Hicimos algunas grabaciones, pero nunca fueron usadas.
—Tenías una banda de versiones llamada Oh Boy, ¿qué solíais tocar? ¿Cómo fue la experiencia?
—¡Qué puedo decir! Fue divertido e hicimos muchos conciertos por Bélgica, Holanda y Francia. Volvimos a tocar las versiones de todas esas bandas de los sesenta en bailes y ferias elegantes. A veces tocamos durante cinco horas o más.
—Otro proyecto paralelo fue Blink it con otros miembros de Irish Coffee. La banda grabó dos discos, ¿cómo se pasa del rock duro al rockabilly?
—Crecí en los 50’s y 60’s y cantaba con mi primera banda las canciones de Buddy, Elvis, Cliff, Eddie…. y más. Creo que Lemmy tenía una banda de rockabilly también.
—Para los fans de Irish Coffee, ¿Cuál de tus discos en solitario recomendarías?
—Been away too Long…. Pero el último que he hecho, Tobacco Fields es también buen R’n’R con la ayuda de Jean–Marie Aerts, Steven Janssens & Walter Broes a las guitarras.
—La banda reeditó el primer disco con su propia compañía Voodoo Records, ¿llegasteis a publicar algo más con esta compañía?
—No, eso fue lo único que hicimos.
—Irish Coffee dio un primer concierto de reunión en 1993, pero no fue hasta el 2oo2 que no empezasteis a dar conciertos regularmente. ¿Qué pasó durante este tiempo?
—Mi idea es que nadie estaba interesado en las bandas de los setenta en esos tiempos y hasta entonces no tuvimos un manager decente, nuestro agente de contratación. Lo puedes ver con la otra banda de esos años, a la gente le empezaron a gustar más las bandas tributos que las originales.
—Irish Coffee publicó un disco homónimo en el 2004. Algunos de los temas provenían de Joystick ¿verdad?
—Creo que hice algunas buenas canciones con Joystick y era una pena que nadie pudiera escucharlas. Volveré a hacer esto en mi próximo disco.
—El disco que Irish Coffee publicado en el 2003 se llamaba Revisited, ¿no crees que el título puede dar la impresión de ser nuevas grabaciones de viejo material?
—Grabé ese disco en formato trío y elegí hacerlo más R&B siguiendo el espíritu de Rory Gallagher, y eso está lejos del clásico sonido de IC. pero eran todos nuevas canciones y un Irish Coffee diferente.
-En When the Owl cries, publicado en el 2015, la banda volvió a grabar una cara b de 1973, “I’m Alive”. ¿Fue una declaración de intenciones?
—Sí, y ¡espero poder hacer este trabajo por muchos años!
—¿Cuáles son los planes de Irish Coffee para el futuro? ¿Algún nuevo álbum?
—Tengo algunos músicos cerca de mí, y juntos vamos a hacer un nuevo disco con algunas canciones geniales… ¡Y vamos a ser famosos!
—La banda va a ser parte de la programación de la noche 50 años de Woodstock en el W-Festival. ¿Nos puedes avanzar algo de cómo va a ser el concierto?
—Creo que vamos a dar un concierto de los 50 años de rock ‘n’ roll, con lo viejo y lo nuevo de Irish Coffee. ¡Nos vemos allí!