El viernes comimos muy pronto para poder ir a ver a Kyle Dixon y Michael Stein tocando la música de la serie Stranger Things. Ya habían estado en otra edición con su grupo SURVIVE, pero en esta ocasión venían a tocar la banda sonora que los ha hecho famosos. El concierto fue en el Auditorio de Barcelona, que por suerte estaba cerca de nuestro hostal. Cuando llegamos había una larga cola y no fue hasta cinco minutos antes de las dos (hora de comienzo del concierto) que abrieron las puertas del recinto y entramos ordenadamente. Había bastante gente y aunque esperábamos algunas proyecciones o incluso algún spoiler de la tercera temporada, solo tuvimos un muy buen juego de luces. Los temas de la serie que nos ha hecho revivir los ochenta fueron sonando, destacando el tema titular, “Walking in Hawkins” o “The First Lie”. Muy chulo.
Pillamos un tranvía y algo de sangría para calentar motores y nos fuimos al Xiringuito, el nuevo escenario que se encuentra en la playa. Ya el día anterior había intentado ver cómo estaba organizado, pero la sorpresa fue mayúscula al llegar. Había sitios para tumbarse, barras con variedad de cocktails y se escuchaba la música relativamente bien incluso desde el agua. Me di un baño mientras me deleitaba con la increíble sesión de Floating Points. Se le veía disfrutar y cantar las canciones mientras los primeros y numerosos madrugadores del festival bailaban bajo el sol. Fue una pena no poder haber visto la sesión entera como era mi idea inicial, pero me cuadraba mejor ir al Auditorio el viernes. Desde que voy al Kappa FuturFestival me he aficionado a las pinchadas largas y cada vez estoy más en contra de sesiones de menos de dos horas. Del Kappa de este año, hablaremos en breve. Con gran pena en nuestro corazón, nos fuimos a Ray-Ban para ver a El Último Vecino. Al no vivir en España, no tengo muchas posibilidades de ver a estos artistas. El sonido no fue muy bueno, otra vez con muchos graves y un poco bola. Sonaron temas como “Dónde estás ahora” pero no logré entrar en el concierto y eso que sus discos me gustan bastante. Quizás el escenario era demasiado grande y éramos poco gente. Tengo que volver a verlos en mejores condiciones, y esperemos que pronto.
Seguimos con otra artista española, en este caso Marion Harper, que tocó en Pitchfork. Su concierto, a pesar de tocar en el escenario con peor fama, sonó bien, apenas el pad eléctrico dio algún problema. No sé por qué en algún momento pensé en Alanis Morissette mientras la veía cuando su referente más evidente, al menos en el último disco, es Lorde. Si quieres saber más de ella, lee nuestra entrevista. Ella tiene buenos temas, como “Mr. Ponytail”, “Ice-Cream”, “October” o “If I Saw you Again”, canta muy bien, tiene una gran presencia escénica y además su banda lo toca todo en directo. Sin duda, se merece mayor éxito. Al terminar nos fuimos a ver a Oumou Sangaré que tocaba en Ray-Ban. Me encontré con un gran número de foreros y amigos que esperaban para verla. Como siempre digo, es un placer poder ver a todos estos artistas africanos en el festival. No voy a poner ningún tópico como buen rollo o increíble ritmo: fue un concierto con muy buenos músicos, una Oumou entregada y grandes temas. De ahí al escenario de enfrente, donde tocaban los brasileños Metá Metá, otro de los grandes ganadores de la edición entre los asistentes. Una original mezcla entre música brasileña, krautrock y alguna cosa más con tremendo trabajo del saxo y el batería. Hubo un momento más tranquilo a mitad del concierto, pero en seguida nos volvieron a poner las pilas. Después corrimos para coger sitio para The National, grupo que aunque han tocado a menudo en el festival, nunca había podido ver. Nos acercamos al escenario Mango, uno de los dos grandes de la zona popularmente conocida como Mordor. Comenzaron con “Nobody Else Will Be There” y tocaron muchos temas del “Sleep Well Beast” su último trabajo. Algunos de sus clásicos también sonaron como “Fake Empire”, “Terrible Love” o “Mr. November”. Terminaron con “About Today”. Fueron muy profesionales y los fans lo disfrutaron mucho o debería decir lo disfrutamos mucho. Seguimos con La Banda trapera del Río, en el escenario Adidas, antes llamado Vice, aunque teníamos mucha curiosidad por Charlotte Gainsbourg que también tocaba a esa hora. Con unas copas en el cuerpo, esperamos el comienzo de estos clásicos del punk estatal, que arrancaron con “Aluminosis Corporal”. Nos comenzamos a animar con ese gran clásico que es “Venid a las cloacas” y ya nos terminamos de venir arriba con la parte final en la que sonaron temazos como “Curriqui de barrio” y “Ciutat Podrida”. Han pasado los años, las cosas han cambiado, pero todavía necesitamos a la Banda Trapera.
Escuchamos el principio de The Internet, que no sonaba demasiado bien, (esto nos lo confirmaron al día siguiente en la playa) y nos fuimos para Cigarettes after Sex. Habíamos escuchado mucho su disco y era otro de los conciertos que más ganas teníamos de ver. Comenzaron con “Truly” y después fue el turno de su versión de REO Speedwagon. Tuve mi época en la que escuchaba AOR, allá por los primeros noventa, y claro, no me faltaba mi recopilatorio de los autores de “Keep on Loving Your”. Me gustó escuchar el tema, pero no se entendía nada de las voces y los graves estaban súper altos con lo que se hizo un concierto muy difícil de disfrutar. Era nuestra tercera decepción en ese escenario, el Ray-Ban, que normalmente suena bien. Terminó el concierto, que se nos hizo un poco largo, estábamos cansados, había sido un día largo y solo nos quedaba Arca en la hoja de ruta. Yo ya lo había visto en Turín en el Club to Club y dado que el sábado iba a ser una jornada muy larga, nos lo saltamos. Me compré unos discos y nos fuimos al hostal.
PD: al final lo de Arca no fue directo, si no una sesión que consiguió molestar a muchos.