A Slice of Life es una banda belga de post-punk con sabor ochentero, autores de Restless, uno de los discos del 2018 que deberíais haber escuchado. Con ellos empezamos nuestra serie de entrevistas a los artistas que pasarán por el W-Fest 2010. Tocarán en el festival belga el próximo 24 de mayo, entregándonos un pedazo de sus experiencias, un pedazo de sus almas… un pedazo de vida.
—¿Cómo se creó la banda? Leí que todo empezó cuando Dirk conoció online a Guy Wilssens.
—Sí, eso es verdad. En algún momento en el 2014, Dirk y Guy se conocieron online e hicieron una versión de Bauhaus. A finales del 2015, Guy había hecho unos cuantos temas instrumentales y le pidió a Dirk que hiciera las partes vocales. Vieron que sonaba bien y quisieron tocar esos temas en directo. En el 2016 empezaron a buscar otros músicos.
—Slice of Life es el nombre de un tema de Bauhaus y el primer tema que Dirk y Guy hicieron fue la versión de “She’s in Parties” que comentábamos. ¿Dirías que la influencia más importante de A Slice of Life es la banda de Peter Murphy o The Cure?
—No, no creo que esas bandas sean nuestras mayores influencias. El nombre de la banda fue elegido, más o menos, como referencia a nuestra primera cooperación, antes de que tuviéramos canciones originales. Claro que, por nuestra edad y preferencias, esas bandas han sido una influencia, pero también lo han sido, por ejemplo, Joy Division, Chameleons, Pixies, Interpol…
—¿Qué bandas modernas han sido influenciado a la banda?
—Somos seis y todos tenemos nuestras propias influencias, que van de The Editors a Rammstein. Es esta mezcla la que crea nuestro sonido.
—Dirk, ¿dónde encuentras inspiración para tus letras?
—No me considero un buen escritor y las letras me son difíciles de escribir. Casi siempre dejo a la canción y a la música que me dicten las letras. No tengo un libro con notas o pequeños poemas o cualquier otra cosa. Escucho la música una y otra vez y algunas veces una frase o una línea de voz aparece y el resto sale a continuación. Una de las razones principales para llamar a la banda A Slice of Life fue, no solo la referencia a la canción de Bauhaus, pero el hecho de que la música y las letras tenían que ser una expresión de lo que pasa/pasaba en mi, en nuestra, en la vida diaria de todo el mundo. Las preocupaciones que tenemos sobre nuestros, los demás, la sociedad… el placer, el dolor que encontramos en nuestras vidas. Una canción como “Panic Attack” o “Life As It Is”, por ejemplo, son muy personales y autobiográficas. Un tema como “Restless Gods” es personal también, pero reflexiona más sobre la sociedad.
—De dúo os convertisteis en un sexteto rápidamente, ¿fue principalmente para poder tocar en directo?
—Sí. Cuando hicimos la demo casera, nos empezamos a dar cuenta de que incluso si publicábamos un disco como dúo, nos gustaría llevar la música al directo. Pero antes necesitábamos formar una banda.
—¿Cómo diríais que cada miembro contribuye al sonido de A Slice of Life?
—Mientras que la mayoría de las canciones de nuestro primer disco están basadas en las demos hechas por Guy, tendemos, cada vez más y más, a escribir canciones desde cero durante nuestros ensayos, donde cada uno aporta su toque y contribuye con nuevas ideas o direcciones.
—Para una banda como la vuestra, ¿creéis que hubierais tenido mejor suerte en los ochenta o ahora?
—Esta es una pregunta fácil: sin duda y por un par de razones: esta clase de música no era tan de nicho como lo es ahora y la radio nacional y también la televisión solían emitirla. Así que la gente joven podía, al menos, escuchar esta música en la radio e incluso verla en la televisión. Vale que la MTV, por aquellos tiempos, emitía más los grandes nombres de la escena, pero al menos esta música estaba disponible. Hoy en día, la gente joven, pero también la gente de nuestra generación, principalmente no sabe que esta música existe, porque la prensa, y los medios de comunicación no le da difusión Por supuesto que esta clase de música está disponible si la buscas, pero en estos días todo tiene que ser rápido y fácil.
—Y ahora una pregunta de esa primera demo de la que hablabais antes ¿cómo fue grabada?
—La demo contiene cinco temas de los cuales tres son grabaciones caseras. Dos eran grabaciones caseras en las que Guy tocó todos los instrumentos y Dirk hizo las partes vocales (“Marionnette” y “Restless Gods”). Una no era realmente una canción de A Slice Of Life: “Feel Like Crazy” fue escrita por Dimitri Desmeth de Bruselas y Yannick Rault de Francia (Dirk tuvo un proyecto con Yannick llamado So What? y Yannick ahora sigue trabajando bajo el alias de Closed Mouth). Ya que Dirk escribió las letras para “Feel Like Crazy”, enseguida la adaptamos como uno de nuestros temas. En la demo se puede escuchar la versión grabada en casa por Dimitri, Yannick y Dirk como So What? En nuestro disco Restless está completamente tocada por A Slice Of Life pero con Dimitri como invitado a los teclados. En la demo, “Sorrow” y “Panic Attack” fueron grabadas en nuestro local de ensayo. Bart, nuestro anterior teclista la grabó y mezcló.
—Unos meses después, la banda fichó con Wool-E Disc, ¿verdad? ¿Cómo se pusieron en contacto con vosotros?
—Desde el comienzo del proyecto, hemos estado en contacto con Dimitri Cauveren de Wool-E Disc. Siempre nos ha apoyado mucho, incluso al empezar, cuando solo teníamos disponibles unas demos caseras. Fue algo natural que se ofreciera a publicar nuestro disco en su sello. Wool-E Disc, desde hace un tiempo, está bien establecido en Bélgica y nos ayudó a expandir el nombre de nuestra banda en la escena wave belga.
—Restless fue mezclado por Koenraad Foesters, y la banda dijo que su experiencia fue muy útil para el resultado final. ¿Qué más nos puedes contar de su colaboración?
—De hecho, estamos extremadamente satisfechos con el trabajo de Koenraad. Considerando que la mayoría del disco consistía en grabaciones caseras, excepto las baterías, nos sorprendió escuchar como sonó el resultado final. Nos dio muchos consejos durante el proceso de mezcla e incluso grabamos algunas partes extras en el último minuto siguiendo sus advertencias. Dado el trabajo tan bueno que hizo, estamos considerando mantenerlo con nosotros para la producción de nuestro próximo disco.
—El álbum ha sido reeditado después de la primera edición, ¿verdad?
—Estábamos felices con el estatus de agotado, pero cuando nos fuimos en junio a tocar al WGT de Leipzig, teníamos alrededor de cincuenta copias y fueron todas vendidas en el festival. Así que nos quedamos sin nada, pero todavía teníamos algunas buenas e importantes giras para este año: Summer Event (Schoten), Neetwave (Retie) 23 de noviembre (con Agent Side Grinder y Silent Runners) y estamos emocionados con ir a Holanda por primera vez, (Geleen Calling 14/12) . Es estúpido que la gente que nos descubra allí no tenga la oportunidad de comprar nuestro disco. Es por eso que decidimos hacer una nueva edición.
—Restless tuvo muy buenas críticas e incluso un muy largo e interesante vídeo de una aficionada. ¿Estáis contentos con la recepción del disco?
—Sí, ¡claro! Bastante mejor de lo esperado. Es verdaderamente un tiro a ciegas el exponer lo que has creado a una audiencia, y dejarlo abierto a comentarios y reseñas del exterior. Ha sido un periodo muy excitante. Lo divertido y lo bueno es que tuvimos reseñas, no solo de Bélgica, sino que también de Alemania, Italia, Estados Unidos, España… y todas muy positivas. El hecho de que salimos en el periódico nacional y tuvimos cuatro estrellas de cinco, fue una de las más grandes sorpresas, junto a ese inesperado y fantástico vídeo de una aficionada que realmente penetraba en cada tema.
—¿Es difícil para una nueva banda el darse a conocer? Vosotros os ocupáis también de la promoción, ¿verdad?
—Hacemos todo nosotros mismos, y dado el hecho de que lo hacemos, podemos estar, por ahora, muy orgullosos con el resultado. De todas formas, esperamos encontrar a alguien en un futuro cercano al que realmente le gustemos y esté interesado en ayudarnos con las giras y la promoción. En ese momento, nos podremos enfocar un poco menos en la parte administrativa y práctica de las cosas y crear música. Porque, después de todo, eso es lo que más amamos.
—¿Crees que los festivales están ayudando a que las bandas sean mejor conocidas?
—Sí, definitivamente. Somos una banda con seis miembros y todos tenemos nuestras obligaciones profesionales y familiares. Estar de gira y tocar en sitios pequeños durante un par de semanas seguidas no es fácil. Por lo tanto, creemos que los festivales son la forma perfecta para presentar a la banda a una audiencia mayor y a gente que no otra forma nunca nos descubriría.
—A final de los noventa, un montón de bandas grabaron canciones para bandas sonoras, como, por ejemplo, el tema “Burn” de The Cure. ¿En qué películas creéis que la música de A Slice of Life encajaría?
—Esta es una pregunta difícil. No sentimos ninguna banda sonora real en nuestra música… pero si tenemos que mencionar alguna, diríamos El Club de la lucha, Smoke, Kill Bill, por nombrar algunas.
—En la vida real parecéis gente bastante alegra y feliz. En cambio, vuestra música es bastante oscura, ¿necesitáis conectar con cierto estado de ánimo para escribir vuestras canciones?
—Diríamos que es un sentimiento, más que un estado de ánimo. La música oscura es simplemente una parte de nuestra juventud. Es nostálgica y nos parece algo natural el escribir canciones de este estilo. La música dicta las letras la mayor parte del tiempo, así que escuchar la música crea el estado de ánimo y la atmósfera adecuadas para escribir.
—¿Qué haríais si la banda fuese contratada por error en vez de la otra banda llamada Slice of Life? A propósito, ¿os gustan Crass (Slice of Life es la nueva banda del cantante de Crass)?
—Tocaríamos de la mejor forma y agradeceríamos a la organización por la oportunidad 🙂 . Para ser honestos, no somos grandes fans de Crass…
—Un par de vosotros también toca en la banda The obsCURE, una exitosa banda tributo a The Cure, ¿cómo empezó este proyecto?
—Como una idea al estar borrachos en un pub cuando alguien dijo que mi voz era similar a la de Robert.
—¿Es más fácil conseguir giras para A Slice of Life o para The obsCURE?
—De hecho, es más o menos igual.
—Mientras escribía esta entrevista, estaba escuchando el álbum Disintegration. Según vosotros, ¿qué elementos deben juntarse para crear un disco como este?
—Disintegration está en la lista de los mejores discos de todos los tiempos de tres de los miembros de la banda. Para nosotros, un disco tiene que ser una reflexión de quienes somos como seres humanos: a veces bromistas, a veces serios, oscuros y tristes… Debe tener un montón de variedad tanto en sonido como en estados de ánimos. Esto lo hace excitante para nosotros y esperamos que para nuestra audiencia. Intentamos crear el mismo sentimiento de variedad también en nuestros conciertos.
—¿Cuáles son los planes para el 2020? ¿Alguna gira fuera de Bélgica?
—Ahora estamos sobre la ola y viendo qué se cruza en nuestro camino y qué podemos lograr. Estamos muy emocionados con tocar en el W-Fest, por segunda vez, a finales de mayo del 2010. Creo que hemos crecido mucho como banda en estos años. Creemos que nuestra música es variada, puede sonar en la radio y que podemos encajar tanto en la escena wave/goth/postpunk y en la alternativa y queremos trabajar en eso también: a la vez en sonar en la radio y en tocar en festivales alternativos, de los que hay un montón en Bélgica. Esperamos ser capaces de tocar en uno o dos buenos festivales en Alemania, y queremos tocar un par de veces en Holanda también. Dado que nuestro bajista es portugués, nos gustaría ir a Portugal ya que allí tienen algunas bandas geniales, salas de conciertos y festivales, y ¿quién sabe, algún día en España?
Pero lo más importante para el próximo año es trabajar en el nuevo disco. Ya estamos tocando en directo un par de nuevas canciones, pero estamos trabajando en muchas más y nos encantaría empezar a grabar un nuevo disco. No queremos fijar una fecha, pero no más tarde del comienzo del 2021, deberíamos publicar un disco nuevo. Para el comienzo del año próximo ya hemos alquilado un estudio para empezar a grabar lo que tenemos y queremos editar un nuevo single en la primavera del 2010.
—Todavía queda mucho , pero ¿qué tenéis pensado para vuestro concierto al W-Fest? ¿Cómo recordáis el anterior concierto en el festival?
—Para ser honestos, en este momento no estamos enfocados en lo que va a ser nuestra próxima gira en el W-Fest. En los ensayos estamos principalmente trabajando en nuevas canciones y preparándonos para las giras de este año. Tenemos muy buenos recuerdos de nuestra primera vez en el W-Fest en el 2018. Nos ficharon con más de un año de anticipo, y cuando lo hicieron solo teníamos material en demo, y ni siquiera un EP o ningún concierto. Fue increíble para nosotros el recibir esta oferta en esos momentos y el sentimiento de que alguien tenía cierta confianza en nosotros basada en ese material grabado en la demo. Nos dieron un auténtico impulso. La organización fue increíblemente profesional. La gente que trabajaba fue muy amable y cálida, y nos sentimos realmente apoyados por ellos. Abrimos el último día, y no había mucha gente, pero el sonido fue fantástico, lo dimos todo y la audiencia recibía bien cada tema y bailaba e incluso cantaba con nosotros. Una experiencia increíble. Estamos muy agradecidos por eso.