A finales de los ochenta, en las discotecas y afters más punteros de España se podía escuchar el mítico “The Stand” en medio de sesiones de techno y EBM, creando un emotivo momento lleno de magia. Fue un tema que sonó en el levante, en discotecas como Barraca e incluso cuenta la leyenda que fue el último tema del popular New World, templo de la música moderna en Madrid. La autora, Joolz Denby, aparte de haber escrito ese pedazo de historia de la música popular, es poeta, novelista e incluso prestigiosa tatuadora. En esta entrevista, exclusiva para el DarkMad, nos habla un poco de esas facetas suyas quizás no tan conocidas por nuestros lectores. Actuará en el festival madrileño que se celebrará entre el 29 y 30 de abril y será una de las pocas veces que podamos ver ese legendario tema en directo.
—Joolz, tu figura siempre ha estado unida a la ciudad de Bradford, ¿cómo ha influido en tu vida el vivir en allí?
—Honestamente, no lo sé. Este es el sitio en el que he vivido más tiempo, Durante cuarenta años he vivido en la misma casa. Es una ciudad pobre, pero tiene una bonita arquitectura antigua y está muy cerca del campo. No voy mucho a la ciudad así que no tengo un círculo social allí, ni siquiera conozco gente. Básicamente soy una ermitaña.
—En un juventud fuiste miembro del grupo de motoristas Satans Slaves. Supongo que no era algo muy normal para una mujer en aquellos tiempos. ¿Sentiste alguna clase de discriminación?
—A las mujeres no se le permite ser miembros de pleno derecho, así que era mi ex-marido el que realmente era un Satan Slave, no yo. Claro que había discriminación hacia las mujeres, como había en el mundo de la música, arte y poesía. Tuve que luchar como un demonio para llegar a algún sitio y durante cuarenta años he tenido amenazas de muerte, violación y tortura. No me importa. Siempre he hecho lo que he querido hacer.
—También fuiste segurata en los inicios del punk. ¿Tienes alguna anécdota divertida de aquellos tiempos?
—Solo que pensaba que los seguratas de la discoteca punk a la que iba eran malísimos en su trabajo y se lo dije, así que me preguntaron si podía hacerlo mejor. Y dije que por supuesto. Entonces me dijeron que podía empezar a trabajar el sábado por la noche y eso hice. Y era mejor que ellos porque aparte de haber estado con los Satans Slaves había sido entrenada en combate por mi padre, quien había sido un soldado de élite. Nunca empieces una pelea si puedes evitarla hablando: ese es mi consejo.
—¿Cuándo comenzaste a escribir poesía? ¿Cuándo empezaste a dar recitales?
—Fui considerada una poeta prodigio ya cuando era una niña y mi trabajo fue analizado por el famoso poeta Ted Hughes cuando tenía once años, así que he estado escribiendo y recitando durante básicamente toda mi vida.
—Has dicho que, en cuanto a tu poesía, los poetas de Liverpool y Dylan Thomas fueron influencias. Pero a la hora de componer canciones ¿quién te ha influido a la hora de escribir?
—Nadie realmente. Mi mayor influencia es la novelista Mary Renault. Su libro The Mask Of Apollo es mi obra favorita de todos los tiempos.
—¿Cuándo y cómo conociste a Justin Sullivan? Supongo que ha sido importante en tu carrera musical.
—Lo conocí hace alrededor de cuarenta y cinco años en un cutre nightclub en Bradford. Durante toda mi vida, había dibujado una cara en los márgenes de mis diarios y cuando este chico – Justin – se dio la vuelta, era esa cara. Empezamos a hablar esa noche y no hemos parado desde entonces. Yo fui la co-fundadora de su banda, fui su primera mánager y he hecho la mayoría de sus material gráfico y los diseños de su merchandise, aparte de toda clase de otras cosas. Quizás deberías preguntarme cuánto he influido yo en su carrera musical 😉
—En tus dos primeros singles Denise y The Kiss, colaboraste con Jah Wobble. ¿Por qué elegiste trabajar con él y cómo fue la experiencia?
—Abstract Records me fichó y un amigo periodista musical sugirió a Wobble, así que la compañía discográfica lo organizó todo. Grabar con el fue una gran experiencia, pero está absolutamente loco.
— En cambio, tu primer disco, publicado en el 1985 y titulado Never Never Land… es ya lo que se denomina “spoken word”. ¿Querías dar una muestra de cómo era realmente tu sonido en directo? ¿Fue “Jackanory” una sátira sobre los punks?
—Sí, me solía preocupar que la gente pensase que iba a aparecer con una banda completa cuando era simplemente yo, lo que realmente pasó en un festival en Polonia, incluso aunque me habían mandado solo dos billetes de avión. Me lo hicieron pasar mal porque no tenía cuatro músicos más. Además, soy una poeta que a veces trabaja con músicos, no la vocalista de una banda. Y sí, “Jackanory” era una suave sátira sobre la escena punk y en lo que se convirtió, muy irónica y con bromas suaves pero, por supuesto, algunas personas se ofendieron.
—Love is Sweet Romance, tu single de 1985, fue tu primer trabajo con la colaboración de New Model Army. ¿Cómo cambió tu enfoque hacía la música al trabajar con ellos?
—Siempre es más fácil trabajar con artistas que conoces. Grababan la pista vocal y la rítmica y luego creaban la música alrededor de eso. En mi opinión, es la mejor manera de ponerle música a la poesía, porque la apoya sin dominarla. Son unos trabajadores muy duros, muy creativos, siempre interesados en cosas e ideas nuevas.
—Por otra parte, has diseñado casi todas las portadas de los discos de NMA. ¿Cuál dirías que es tu favorita? ¿Cómo las creabas?
—He diseñado un 95% de las portadas de los discos y singles y un 95% del merchandise. A veces las compañías de discos o algún mánager piensan que saben más que ‘una chica’ y hacían alguna mierda horrible, pero bueno… Mi portada de disco favorita cambia a menudo, pero actualmente me gusta Winter.
—“The Stand” fue un clásico de las pistas de baile, realmente popular en España a finales de los ochenta y comienzos de los noventa. ¿Nos podrías contar algo sobre la composición y grabación de este legendario tema?
—”The Stand” es sobre la aparición de New Model Army en el programa musical de la BBC Top Of The Pops. Subvertimos todo el evento, discutimos con todo el mundo y la banda tocó en directo sin pistas de acompañamiento, algo que no era frecuente. Pero aunque todo el mundo dijo que salieron victoriosos, nosotros no sentimos eso. Además, no creo que nadie haya “ganado” alguna vez en una batalla, todo el mundo acaba herido, todo el mundo se siente sucio incluso si no lo admiten.
Es un tema que le habla al orgullo, a la inocencia de la juventud que piensa que sabe todo pero en realidad no lo hace y el doloroso sufrimiento de crecer en un mundo duro y difícil, de convertirse en un artista. Es sobre los amigos de juventud que se distanciaron y lo que pasó con ellos. Lo grabamos en el campo, en un estudio en Cornwall, muy alejado, muy bello.
—También nos gustaría hablar un poco sobre tu trabajo como novelista. ¿Cómo comenzaste a escribir novelas policiacas? “Stone Baby” es el título de la primera, ¿fue difícil el paso de la poesía a la prosa?
—No, fue fácil. Solamente tardas más tiempo. Mis poemas son mayoritariamente historias, así que las novelas son, simplemente, historias largas. “Stone Baby” ganó el premio a la mejor novela policiaca del año y además estuvo nominada a otros premios. Pero “Billie Morgan” es la mejor novela que he escrito, fue candidata al Orange Prize.
—Hablando de “Billie Morgan”, esta novela estuvo, en cambio, basada en tus días como motorista. ¿Pones mucho de tu propia experiencia en tus novelas? La mayoría de ellas ocurren en Bradford o en lugares en los que has estado viviendo. ¿Crees que es más fácil crear ficción partiendo de la vida real?
—Quería que “Billie Morgan” fuese tan realista sobre la vida de un motorista como fuese posible porque muchas “novelas de motoristas” son simplemente ridículas. La mejor manera era distanciarme un poco y usar mi propia vida como material. Siempre es mejor escribir sobre cosas que realmente conoces y luego usar eso como base para apoyar a tu imaginación. .
—”A True Account of the Curious Mystery of Miss Lydia Larkin and the Widow Marvell” es una pieza bastante curiosa ya que se podría catalogar como realismo mágico. ¿Has estado interesada en la literatura latino americana ya que ellos son los que han escrito algunas de las mayores obras maestras del género?
—Siempre he estado interesada en la mitología especialmente en la griega, así que pensé que sería interesante explorar lo que le pasa a los dioses cuando nadie los adora más, investigar la magia en las cosas de la vida diaria y en la amistad. Fue muy divertida de escribir.
—Tu última novela, “Wild Thing”, es del 2012, ¿estás escribiendo una nueva?
—Estoy escribiendo ahora una novela que trata sobre la industria moderna de la música, los artistas de un solo éxito, la cocaína, la vanidad, los gángsteres rusos, el arte, la vida y la muerte. Está basada en la historia de Orfeo.
—Creaste tu propia compañía editora, llamada Ignite Books. ¿Cómo van las cosas? Ha publicado libros de Tezz Roberts de Discharge y Ross Lomas y GBH, ¿verdad?
—No. El tío con el que creé la compañía hizo una adquisición hostil y se quedó con ella. Quería publicar a todos los hombres que admiraba en la música rock. No tenía ni tiene nada que ver conmigo. Esos libros son ciertamente algo que yo nunca hubiera publicado.
—En una entrevista comentaste que has antepuesto tu trabajo a tu vida social. ¿Crees que es algo que se va haciendo más difícil con los años?
—Ojalá no lo hubiera hecho cuando era más joven, ya que necesitas un círculo social cuando te vas haciendo más vieja y no tienes familia directa como yo. Pero el trabajo lo era todo para mí, así que ahora estoy generalmente sola, una vieja mujer, una especie de monja secular viviendo en mi casa que se cae abajo y en mi jardín salvaje, con los ciclos de la naturaleza y las estaciones. Es una vida muy solitaria, pero es una vida de artista.
—Volviendo a tu carrera musical Red Sky Coven es una especie de proyecto de música folk. ¿Qué nos puedes contar de él? Todavía giras con ellos, ¿no?
—Ya no giramos porque los hombres con los que trabajaba o tienen pareja que no lo aprueban o tienen su propio trabajo que tiene prioridad. Fue un proyecto único, alucinante que nos gustó mucho realizar y que le encantó a gente de toda Europa.
—También nos gustaría saber algo más de The Black Dahlia, tu disco con Mik Davis.
—Mik era un joven músico muy creativo que pasó un año trabajando en el disco, lo que, además, creo que fue para él un gran terreno de entrenamiento como productor. Continuó produciendo a bandas locales y poetas y ahora trabaja sin descanso y desinteresadamente en temas de salud mental juvenil de nuestra zona. Ahora es muy respetado en ese campo y no saben que una vez fue una loca estrella de rock, que giraba con una fantástica banda.
—Tu último disco, Crow, fue grabado con el compositor alemán Henning Nugel. ¿Cómo fue trabajar con alguien alejado del mundo del rock?
—Henning es fantástico. Es un gran músico muy técnico que es muy intuitivo y ¡al que nunca he conocido en persona! Es muy divertido ya que nunca hemos hablado, ni siquiera al teléfono. Nos comunicamos por email o usando los social media. Es algo totalmente moderno. Simplemente le mando la pista vocal y él crea paisajes sonoros alrededor de ella. Es un tío fantástico. Muy amable y bueno.
—Fuiste la mánager de la banda New York Alcoholic Anxiety Attack, ¿verdad? ¿Cómo describirías la experiencia de trabajar con un grupo de esa forma?
—He sido la mánager y “tour manager” de un par de bandas. Todo se reduce a ser organizada y estar atenta a los detalles. Es un trabajo duro y lo he disfrutado. Y estoy habituada a trabajar duro. Simplemente tienes que ser paciente y olvidarte de tu ego. Me gusta, es un cambio..
—Además, eres una famosa tatuadora. ¿Cuándo empezaste con esto? ¿Qué buscas expresar cuando haces un nuevo tatuaje?
—He trabajado en la industrial del tatuaje desde los setenta, pero en aquellos días a las mujeres no se les motivaba para que fuesen tatuadoras, así que me olvidé de ello hasta que el maestro tatuador Ben Stone (que estará conmigo en el DarkMad) dijo que ya era hora de que cumpliera mi vieja ambición y me enseñó. Fue bastante duro porque todo el mundo me observaba esperando que fuese una “famosa tatuadora”, pero no lo soy. Soy una artista que trabaja con tatuajes, es una cosa muy chamanista, muy mágica. Es un proceso transformador, cambiador de la vida. Mis clientes vienen a mí por una experiencia integral y por mi arte. No copio, solo tatúo mi propio trabajo.
—¿Cómo ha sido tu vida durante estos últimos años?
—Loca, desgarradora, creativa, extraña, vertiginosa, oscura, dorada e inmersa en amor y dolor.
—Brexit, la guerra en Ucrania, el eterno problema de la violencia doméstica…. El mundo no parece que vaya a mejor. ¿No te has llegado a cansar de luchar por lo que es justo?
—Dios mío, nunca. Nunca pararé de luchar por la justicia y los derechos y seguridad de las mujeres y los niños. El Brexit es un desastre total para mi país, una jodienda de proporciones colosales que ha destruido el Reino Unido. Me hace llorar por mi país.
—Dos artistas, una de los años ochenta y una moderna siempre he encontrado similitud con tu obra. Hablo de Anne Clark y Kae Tempest. ¿Estás interesada en su música o en sus letras?
—No he seguido su trabajo, así que no podría decir.
—¿Qué podemos esperar de tu actuación en el Darkmad?
—Estoy trabajando con músicos del DarkMad, es una colaboración, un experimento artístico. Estoy extremamente contenta porque a los aficionados a la música de España les encante mi tema. Significa mucho para mí y es un honor poder tocar “The Stand” para ellos. Espero que disfruten del trabajo de una vieja poeta.