Nunca olvidaré la impresión que me dio escuchar “One Chord Wonders” por primera vez. Encontré una rabia que no era habitual en los anodinos discos de AOR que escuchaba por esa época. Fue el disco que hizo clic en mí, que me hizo amar el punk. Más de veinte año después encuentro todavía más necesario el sintonizar con esa rabia de los temas de The Adverts. Es un orgullo para nosotros poder hablar con TV Smith, creador de varios himnos punks y de mucho, mucho más.
—Has escrito hasta ahora cinco volúmenes de diarios de tus giras, ¿cómo te surgió la idea de escribir sobre tus experiencias?
—Nunca planeé escribir cinco volúmenes, simplemente empecé a escribir lo que me pasaba cuando estaba de gira porque pensé que la gente podía estar interesada en saber cómo es realmente. Por lo que le concierne al público, apareces en el escenario por la noche y lo que te ha llevado hasta ahí es un misterio. Creo que la mayoría de la gente asume que sales por la mañana del hotel, te subes en el autobús de gira y llegas al concierto, y eso es todo. Puede ser así para algunas bandas famosas, pero para los músicos independientes, la realidad es muy diferente, hay muchos desafíos, cosas divertidas, difíciles e incluso aterradoras durante el camino.
—Estás girando con los Bored Teenagers, ¿piensas que es la banda definitiva para tocar tus temas?
—Sí, tienen el entusiasmo y la dedicación para convertir las canciones de The Adverts en versiones que funcionan sobre el escenario en el 2017 y son incluso capaces de tocar las nuevas canciones verdaderamente bien. El problema es que viven en España y yo vivo en Inglaterra, lo que significa que solo podemos hacer giras ocasionalmente pero creo que nos compenetramos mejor que muchas bandas que giran continuamente. Somos buenos amigos, nunca discutimos y estamos completamente dedicados a tocar lo mejor que podemos.
—¿Hay alguna banda nueva que te guste especialmente? ¿Qué te parece la música moderna?
—Creo fuertemente que la buena música no desaparece, simplemente es ignorada por la industria discográfica. Escucho muchas bandas y solistas que me gustan, pero nada en la radio o televisión comercial. También hay muchos artistas veteranos, como yo, todavía creando buena música y no somos escuchados tampoco. No hay música moderna, solo música. El alma y el espíritu que crean nunca cambia.
—¿Cómo fue la experiencia de regrabar tus canciones con Die Toten Hosen para el recopilatorio Useless?
—Fue una gran oportunidad para mí de tener el lujo de un estudio profesional para grabar y una gran banda con la que hacerlo. Die Toten Hosen eran grandes fans de mis canciones pero la mayoría de los discos que había hecho hasta ese día habían sido grabado con un presupuesto muy bajo, con diferentes músicos en diferentes estudios, a menudo muy baratos. No hay nada malo en eso, pero la idea de Useless era la de juntar las mejores canciones y darlas un sonido consistente y un buen acompañamiento. Estuvimos muy felices con el resultado.
—Finalmente tenemos una reedición de la música de Cheap, ¿crees que estas canciones merecieron una mejor suerte?
—Para ser honesto, creo que todas mis canciones desde que rompieron The Adverts, podrían haber tenido mejor suerte, pero las cosas son como son. Cheap fue una experiencia particularmente dolorosa para mí, porque hicimos el disco en unas muy difíciles circunstancias. Ninguna compañía quería financiar la grabación, así que acabamos usando un estudio que estaba a punto de arruinarse, trabajando en la mitad de la noche para conseguir una tarifa por hora más económica. Cuando finalmente terminamos el disco, nadie quería publicarlo. Fui capaz de publicarlo solo unos años después, cuando la banda ya se había separado. Ahora lo he publicado de nuevo en una versión remasterizada con algunos temas que no aparecieron en la primera versión y unas Peel Sessions, las cuales creo que son de lo mejor que la banda hizo. Estoy feliz de que esté publicado y la gente lo pueda escuchar. Todavía hay unos cuantos discos de mi catálogo sin publicar…
—¿Cómo fue tu relación con Stiff Records? Muchas cosas se han dicho sobre su peculiar forma de dirigir la compañía.
—Eran verdaderamente únicos. Trabajar con Stiff tenía sus ventajas y desventajas. Porque el sello tenía tan fuerte carácter, ellos tenían control casi total sobre la forma en que los discos salían y como se comercializaba. Así era como preservaba la imagen del sello, claro, pero significaba también que las bandas tenían poco control sobre cómo la música se presentaba. No tengo quejas, estar en Stiff fue un gran paso para los Adverts.
—Desde Channel 5 hasta I Delete, has sacado nueve discos ¿Cuál recomendarías a alguien que solo ha escuchado los dos de los Adverts?
—Escúchalos todos, ¡si puedes encontrarlos! Hablando en serio, es una pregunta imposible. Para empezar, los dos discos de The Adverts suenan completamente distintos uno del otro. He intentado no repetirme durante los últimos cuarenta años, así que cada disco tiene un acercamiento distinto y un estilo distinto. La única cosa conectándolos es la forma de escribir las canciones, que creo que he mantenido consistente. Si te gustan las canciones de los discos de The Adverts, creo que te gustarán las canciones de los otros discos también.
—Y la pregunta obligatoria sobre Crossing the Red Sea with the Adverts, ¿cómo fue grabar con Larry Wallis? ¿Crees que el disco hubiera sonado diferente si el productor hubiera sido Nick Lowe (el otro productor de Stiff Records)?
—Larry Wallis grabó “One Chord Wonders” para nosotros en Stiff, y luego volvimos a contar con él para grabar “Gary Gilmore’s Eyes”, que fue grabada para Anchor Records. Cambiamos de nuevo de sello para Crossing the Red Sea y le preguntamos a John Leckie si quiería producirlo. Creo que los dos hicieron un gran trabajo. Larry fue perfecto para los singles y John fue perfecto para el álbum. Hubiera sido fabuloso también trabajar con Nick Lowe. Me encanta la producción del primer disco de The Damned y soy un gran fan de sus recientes discos en solitario también.