El dúo más simpar de la coldwave/electronic body music por fin tiene un libro que recorre la carrera completa de la banda. Words Sword Words se presenta en una cuidadísima edición en tapa dura que cuenta con 340 páginas en la que nos sumergimos en el universo único de Parade Ground. Está editado por Vuz Records y lo podéis pedir aquí.
La primera parte del libro es una autobiografía de Parade Ground en la que los dos hermanos se funden en un solo narrador para hablar de su humilde infancia, su amistad con Front 242 (con un íntimo retrato de las relaciones en la banda), la grabación de sus discos (y también la de 06:21:03:11 Up Evil de Front 242), los años pasados formando parte de una estricta comunidad católica (los discos Rosary and Sanctuary fueron grabados en esa época), su relación con el Wire Colin Newman… todo esto relatado con la prosa inconfundible de la banda. También añaden listas de discos y temas favoritos y nos hablan de cine mudo, literatura y qué significa para ellos la EBM. A continuación tenemos todas las letras en orden cronológico, una buena lectura para entender el mundo poético de los hermanos. Su faceta artística está cubierta por una serie de dibujos de Jean-Marc Pauly y fotos y cartas de Pierre Pauly.
La parte gráfica comienza con posters y flyers de sus primeros conciertos y de los lanzamientos de sus discos. El libro continúa con una selección de fotos, comenzando con las primeras fotografías promocionales e incluyendo un auténtico viaje por el tiempo de sus directos con, entre otros, instantáneas de nuestro gran amigo Patrice Hoerner que se encarga también de la portada.
Para terminar tenemos testimonios de músicos, periodistas y gente del negocio. Comienzan, como no, los miembros de Front 242, y siguen JΔ3 SEUQCAJ, los tristemente desaparecidos Hapax, el omnipresente Peter Mastbooms (responsable de su vuelta, como de tantas otras bandas) y Dirk Ivens. También tenemos textos de comunicadores como nuestro amigo JL Marchal, Vanesa de All Waves, y tres personajes muy importantes durante la segunda vida del grupo: Béa Leblanc, auténtico ángel guardián de los hermanos y, cerrando el libro, Holger y Ursula, los capos de Vuz Records, la casa discográfica de Parade Ground, dos personas tan encantadoras y amables como los propios músicos.
Por nuestra parte queremos darles las gracias por contar con nosotros para colaborar, y por supuesto, por acordarse de nosotros en los agradecimientos. Cuando me ofrecieron escribir algo, tuve claro que sus directos era lo que más me había impactado de la banda y eso quise reflejaren mi palabra. Para mi sorpresa, la mayoría de los invitados señalan lo mismo: ver a los hermanos es una experiencia increíble. Una experiencia que comprenderéis mejor leyendo este libro.