Trayectorias en coma es el primer disco de Mandelbrot, un inquieto músico granadino, que entre otras cosas, ha colaborado en el proyecto paramusical Máquina Líquida para el que ha creado un fondo sonoro a los versos del poeta Rubén Martín, además de haber reunido sus primeras grabaciones bajo el nombre de Demos en el 2011. Tras varios años trabajando en esta ambiciosa obra, por fin el debut de Mandelbrot ha sido publicado hace unas semanas: un disco muy variado, extremadamente complejo y con unas letras en las que vale la pena adentrarse. Lo puedes escuchar y comprar aquí.
Trayectorias en coma comienza con una palabra: Invisigoth, pronunciada por un amigo del artista, fallecido hace diez años y al que están dedicados los dos primeros temas. Dicha palabra resuena durante “Alfa”, como si fuera un eco del pasado. Un comienzo marcado por un final, un camino que se pensaba eterno, pero que se muestra, de improviso, efímero. Musicalmente me recuerda a cosas de Nicolas Jaar y el propio músico reconoce la influencia del disco de Darkside que el chileno grabó en el 2013. “Más Frágil”, continuación temática de la anterior, se sirve de estrofas recitadas, a ritmo de 2-steps para contar cómo convivir con la pérdida. La parte final me recuerda, en la forma de cantar, a Corcobado, aunque no creo que sea una influencia del artista.
El siguiente tema “Todo siempre eterno” se acerca al rock industrial con influencias de Coil y Nine Inch Nails con un potente estribillo que gracias al contraste con la suavidad de las estrofas produce mayor impacto. En cuanto a la letras, nos encontramos con referencias al poema Los Hombres Huecos de T. S. Elliot en la parte final. La influencia industrial continúa en el siguiente tema, “La primera Ley” aunque tras unos primeros segundos, sea el trip hop el estilo dominante. Mandelbrot se atreve a rapear su letra más furiosa que cuenta aquí con la dulce voz femenina de Cristina Carrión creando un bonito contraste.
“Potencial de Reposo”, es un instrumental que nos sirve de descanso después de la intensidad lírica de los dos últimas canciones. “Habitante X sub-i” se deja contagiar de la atmósfera del tema anterior, pero le añade elegancia quizás proveniente de la influencia de los últimos Talk Talk. Subimos de intensidad de nuevo con “El remedio”: post-rock entre Sigur Rós y Massive Attack en el que vuelven la voz femenina y la influencia industrial. Para “Versión interna” Mandelbrot ha reciclado elementos de su pasado creando una de las piezas electrónicas más interesantes del disco. “La cuarta Palabra”, el tema más largo, es una crítica del pensamiento religioso, donde la percusión cobra un importante protagonismo, dándole un aire funky e industrial. El título del tema final, “Todo siempre Efímero” complementa al cuarto tema mientras se despide de nosotros entre susurros.
Con la descarga digital a través de BandCamp, además de un precioso artwork con las letras, se incluye el tema “Invisigoth”, una grabación amateur que hizo el autor del disco junto al amigo que falleció del que se habla en los primeros temas y que forma la primera pieza de estas Trayectorias en coma.