“(Feels Like) Heaven” es uno de esos temas que, si has vivido los ochenta o simplemente estás interesado en la música de esa época, debes conocer. La banda de new wave Fiction Factory tocaron la tecla mágica con ese tema, pero además grabaron dos álbumes que os invitamos a descubrir. Hemos hablado con Kevin Patterson, cantante de la formación escocesa que estará el próximo 24 de agosto en el festival belga dedicado a la música de los 80s, W-Fest.
—Kevin, tu primera banda, en la que tocabas con algunos de los músicos que después formarían Fiction Factory, fue The RB’s. En aquellos momentos estabas en una onda más cercana al ska, ¿verdad? ¿Qué recuerdas de esos días?
—Para ser más exactos, toqué con Eddie de FF en una banda de new wave llamada Street People antes de The RB’s. Eso fue más o menos en 1978. Tocábamos temas originales mayoritariamente escritos por mí y versiones de Magazine y de los Ultravox! de John Foxx. Para mí, Ultravox! (con el signo de exclamación) es el auténtico Ultravox y tengo recuerdos realmente buenos de esa época. Pero me has preguntado por The RB’s…
The RB’s o, para darle su nombre original, The Rude Boys fue la primera banda en la que sentí que éramos lo suficientemente fuertes musicalmente y que estábamos a la altura para ir más allá del solo tocar en Escocia. Mis recuerdos de esa época son un gran borrón de energía debido al estar dando conciertos continuamente -en el último año que estuve en la banda, tocamos unos buenos 300 bolos- mientras algunos de nosotros manteníamos trabajos a tiempo completo. Fue como si hubiéramos hecho un montón en lo que realmente no fue mucho tiempo, más o menos unos 18 o 20 meses: abandonamos todas esas primeras versiones que tocábamos y empezamos a escribir nuestros propios temas, todos esos conciertos, dos singles y un álbum, fuimos teloneros de un par de bandas muy famosas en esos tiempos. Hicimos mucho, pero entonces llegaron esas desafortunadas “diferencias musicales”…
—Entonces, ¿por qué dejaste The RB’s?
—¡Por esas desafortunadas “diferencias musicales”! The RB’s era una gran banda (8 miembros) y no pudimos aguantar juntos tanto tiempo. Algunos de los miembros de la banda estaban muy –diría que muy fácilmente– influidos por las modas y corrientes musicales y así no era como yo quería que la banda se desarrollase. Así que Chic (guitarrista de FF) y yo nos fuimos, y al poco tiempo nos siguió Eddie (el teclista de FF) y ahí fue donde –y después de un poco de “Vale, ¿qué hacemos ahora?”– nació Fiction Factory.
—¿Cómo se te ocurrió un nombre como Fiction Factory?
—Fue idea de Chic. Habíamos hecho una lista de nombres y parecía el más apropiado para lo que queríamos hacer, que era escribir montones de canciones para otra gente – ¡como una fábrica! Y después de tocar tanto en directo con The RB’s, queríamos sentirnos libres de permanecer en determinados roles, así que la idea de una banda que no existía, en aquellos momentos, era una idea bastante atractiva– y además una ficción. Así que: ¡Fiction Factory!
—¿Y cómo llegó el cambio de ska a synth-pop?
—Eddie y yo siempre hemos sido grandes fans de Kraftwerk, desde el primer disco – si conoces el tema “Ruckzuck”, ¡me hizo querer tocar la flauta! Escuchábamos un montón de bandas de synth pop contemporáneas (OMD eran unos de nuestros favoritos) y habíamos experimentado con música electrónica mucho antes de The RB’s… un montón de cosas extravagantes con múltiples casetes, cintas de bobina y sintetizadores baratos.
Así que no hubo una decisión consciente de cambiar. Simplemente volvimos a los que hacíamos antes de The RB’s, pero con un montón más de disciplina y una idea mucho más clara que lo que estábamos intentando hacer.
—¿Cómo te sentiste al tener un gran éxito con “(Feel Like) Heaven”? Cuándo lo estabas componiendo, ¿ya pensabas que llegaría a ser tan exitoso?
—Aunque esas son dos preguntas, están realmente muy conectadas. Cuando Eddie y yo le pillamos el truco a los temas de “(Feels Like) Heaven”, todo ganó un impulso y una vida propia y todo encajó en su sitio sin que ninguno de nosotros tuviera que debatir o desesperase por nada. Simplemente fluyó y supimos que había algo diferente en lo que habíamos escrito.
Pasaron dos años y vivimos con el tema durante todo ese tiempo. Las cosas despegaron, entramos en las listas de éxito y la gente empezó a decir “¡esta es una canción fantástica! ¡Es un clásico” y Eddie simplemente dijo “sí, lo sabemos!”. Es un sentimiento muy satisfactorio el creer -saber- que estás en lo cierto sobre algo que has creado y que la gente está de acuerdo contigo.
—¿Qué artistas te han influido como cantante? En el pasado has nombrado a The Walker Brother y Sparks como influencias en “(Feel Like) Heaven”?
—Sí, esos dos parecen haberse metido en mi cabeza. Ambos explican definitivamente porqué cantar en varias octavas en el mismo tema es una cosa perfectamente natural para mí!
Me gustaría dar una mención de honor a Howard Devoto de Magazine – La estrofa de “Heaven”: “twisting the bones until they snap” está muy inspirada en él.
—Hablando de nuevo del tema más famoso de la banda, dijiste que “(Feels Like) Heaven” es sobre una ruptura amorosa. ¿Estaba basado en algo que te pasó?
—No, tenía muy buena relación con mi novia de esa época. Pero solía ser un poco pesimista en esos días, ¡no necesitaba mucha imaginación para pensar en lo peor!
—¿Por qué crees que Throw the Warped Wheel Out, vuestro primer LP, no alcanzó el éxito?
—Teníamos una relación antagonista con nuestro sello discográfico (CBS) lo cual, cuando se publicó el disco, significada que ninguno de nosotros estaba escuchando al otro. Fuimos víctimas de una compañía discográfica con una actitud ambivalente y que tomaban unas decisiones menos que óptimas.
Y claro, habíamos creado un monstruo llamado “(Feels Like) Heaven”, que era solo un aspecto de Fiction Factory. Cuando el disco fue publicado con un montón de temas que no sonaban como él, creo que la gente quizás se sintió confundida. Es posible que incluso decepcionada de que no fuera un álbum lleno de temas que sonaban como él.
—¿Qué paso en 1984 que la mitad de los miembros abandonaron el grupo?
—¡Esas desafortunadas ‘diferencias musicales’!
—¿Y cómo fue la gira con OMD? Supongo que hubo una buena relación ya que los hermanos Weir colaboraron en el siguiente disco.
—Ya que teníamos el mismo mánager, era inevitable que nos encontraríamos con ellos en algún momento. Como dije antes, OMD fueron una influencia –aunque solo fuera porque yo tocaba el bajo y Eddie los teclados–y llegué a conocer a Andy McCluskey un poco… lo suficiente para visitarlo en el estudio cuando estaban mezclando su disco Crush y escuchar un adelanto del tema título.
Los hermanos Weir iban, en un principio, a ser miembros de Fiction Factory pero de alguna forma acabaron tocaron con OMD.
—¿Qué nos puedes contar del segundo disco de Fiction Factory, Another Story? ¿Fue difícil de grabar con solo tú y Medley de la banda original? No tuvo mucha promoción ¿verdad?
—En esos tiempos, solía tener montones de ideas para canciones en un corto espacio de tiempo; las partes básicas de los temas del segundo disco que escribí o que ayudé a componer aparecieron en alrededor de diez días. Así que para mí, la composición de los temas no fue realmente muy diferente.
Con el disco siendo publicado en el sello de nuestros mánagers –Foundry Records– no había realmente mucho presupuesto pero sentíamos que todavía teníamos algo que decir que pensábamos que la gente quería escuchar. Supongo que era más importante para mí que hubiese un disco que ese disco tuviera éxito. El lado positivo de que no vendiera muchas copias es que ahora es una pieza de coleccionista ¡y vale un montón de dinero!
—Llegaste a decir que querías que Another Story fuese el último disco de Fiction Factory. ¿Por qué?
—Me di cuenta de que estábamos perdiendo fuelle. Y Chic y yo nos habíamos empezado a mover en diferentes direcciones musicalmente. En ambos casos, nuestros roles dentro de Fiction Factory eran casuales –nunca tuve el propósito de ser El cantante y Chic hubiera preferido no ser El guitarrista– así que un tercer disco de canciones hubiera sido difícil para los dos.
—En “Hit the Mark” hay influencias del Worldbeat. Algunos de vosotros, especialmente Medley y tú, habéis estado involucrados en las músicas del mundo con la banda Mouth Music, ¿nos podrías contar algo más de esto?
—Mouth Music fue realmente una oportunidad para que Chic hiciera de ingeniero de sonido y trabajase en la producción junto a algunos amigos de esa época. Mi única intervención consistió en hacer coros en un par de temas, así que no tengo mucho que decir aparte de que ¡fue la única oportunidad que he tenido de cantar en gaélico!
—Después de separaros, estuviste en una banda llamada The Dearhearts, que solo grabó un split en 1990. ¿Nos puedes contar un poco más de esto?
—The Dearhearts fue un proyecto musical que una amiga –Karen Smyth – y yo creamos, pero fue uno de esos frustrante episodios en el que los temas tenían una indudable calidad, pero no lograron captar la atención de nadie para que llegasen a una más amplia audiencia.
Hicimos un esfuerzo consciente para que yo no cantase en ninguno de los temas –de todas formas, Karen era una gran cantante con una voz con un tono maravilloso– y estuve más que feliz de estar en las sombras toqueteando botones.
—Hay actualmente un gran interés en la música de los ochenta y el W-Fest es simplemente uno de los ejemplos. ¿Qué encuentras fascinante en la música de esa década?
—Para mí, es la variedad, la diversidad de artistas, estilos y sonidos. Yo reduzco completamente todo esto a que la tecnología en la música estaba todavía en su infancia en esos tiempos, así que si querías un sonido de teclados, tenías que hacerlo tú mismo. Hoy en día hay una industria completa construida sobre sonidos y ajustes predeterminados, y sea lo que sea lo que buscas, está simplemente a un botón de distancia. Por eso tanta música pop suena parecida ahora… es música descuidada compuesta por gente vaga que pulsa botones y pasa la voz del cantante por el auto-tune.
—Tras aparecer en la serie def Netflix Stranger Things, Kate Bush volvió a ser número uno. ¿Qué piensas de esta forma de redescubrir música?
—Creo que es fantástico. Siempre me ha gustado la idea de que –años después– un tema pueda ser redescubierto y se le insufle nueva vida. Lo hemos visto con “(Feels Like) Heaven” cuando ha sido reinterpretado por la potente banda alemana de heavy metal Atrocity y también incluso con la banda, incluso más poderosa, de marcha Los Amigos de Compostele. Me encantaría que la gente reinterpretara ESAS versiones y no el original y ¡ver qué pasa!
Con un gran artista como Kate Bush, esperemos que anime a la gente a escuchar todos sus otros trabajos y se enamore de su música.
—Después de no tocar juntos durante treinta y cinco años, ¿cómo fue la experiencia de trabajar con el resto del grupo de nuevo? ¿Y por qué os reunisteis? ¿Fue por qué os lo preguntaron del festival Rewind Festival o hubo otra razón?
—Sí, básicamente alguien hizo lo que nadie más había hecho hasta entonces: ¡nos lo pidió! Es decir, no habíamos tenido ninguna clase de perfil durante unos treinta años, pero aproximadamente veinte segundos de buscar en google habrían bastado para encontrar al menos a uno de nosotros.
Juntarnos de nuevo parecía raro al comienzo… fue como si volviéramos a estar juntos de nuevo tras un par de semanas de vacaciones. Las relaciones, el humor, formar parte de la misma onda emocional, todo eso llegó de forma casi inmediata y los ensayos eran, me atreveré a decirlo, divertidos.
—Has estado trabajando en un departamento informático durante estos años. ¿Echabas de menos ser una “estrella de la música pop”?
—No, siempre he sido un cantante reacio y ¡definitivamente no soy un showman del estilo de Freddie Mercury! Cuando me retire del trabajo, estaría bien volver a componer temas o tocar en una banda como bajista, que es donde empecé cuando tenía quince años.
—La reunión fue para el Rewind Festival, ¿verdad? ¿Cómo reaccionó el público?
—Hicimos dos Rewinds – uno en Perth y otro en Henley – y la recepción en Perth fue fantástica. La cordialidad del público me hizo pensar: “hm, ¡creo que he echado de menos esto!” El Rewind de Henley estuvo plagado de problemas técnicos, y la audiencia tuvo que esperar unos noventa minutos antes de que pudiéramos salir al escenario.
Como te puedes imaginar, un lento aplauso de una audiencia aburrida no es lo que quieres oír antes de tocar, así que me llevó a pensar: “no, definitivamente ¡no echo de menos hacer esto!”
—La banda escocesa de rock alternativo Manic Street Preachers hizo una versión de “(Feels Like) Heaven”. ¿Cómo te sentiste cuando lo supiste? ¿Te gustó?
—Fue una completa sorpresa y sobre todo un honor. La cosas más interesante sobre la versión que grabaron fue que, cerca del final, hay esta línea de sintetizador que parece que se eleva y pensé que sonaba como hago que una de mis bandas favoritas –Magazine– haría, y luego descubrí que Magazine fue también una de sus primeras influencias.
¡Me encantan TODAS las versiones que se hacen del tema!
—¿Cuáles son vuestros planes para el futuro?
—El plan es no tener plan. Tocaremos en el W-Fest y veremos lo que pasa. ¡Quizás haya alguien ahí que quiera financiar una gira de estadios por Europa!
—¿Qué podemos esperar de vuestro concierto en el W-Fest?
—El tener solo un tema que un montón de personas conocen significa que ¡vamos definitivamente a sorprender al público con los otros! Hemos revisado todos los temas del repertorio y espero que a todo el mundo le guste el resultado; hay temas del primer disco, otros del segundo y un par que siempre quisimos grabar pero nunca lo llegamos a hacer. Así que incluso si el mayor fan del mundo de Fiction Factory está allí, verá algo que no se ha visto antes.