La portada de Hébéphrénie, primer disco del dúo de Lyon Lovataraxx, sin duda tiene un especial magnetismo, comparable a la música que contiene. Originalmente publicado por el sello francés Unknown Pleasures, en una edición que no tardó en agotarse, los doce temas que lo componen conjugan perfectamente ritmos bailables con letras que te hacen pensar. El año pasado, esta vez en el sello Cold Transmission, han publicado un segundo disco, adecuadamente titulado “Sophomore” que los acerca, un poco más, a la pista de baile. Podremos disfrutar de su música en la próxima edición del Ombra, que tendrá lugar este mismo fin de semana en Barcelona.
Fotos: Tanguy Guézo
—Durante vuestras vacaciones de 2013, mientras cruzabais el puente Williamsburg, se os ocurrió la idea de la banda. ¿Cómo fue eso? ¿Qué fue lo que realmente pasó?
—Eso fue durante la primavera en la ciudad de Nueva York. Helene y yo acabábamos de comprometernos. En ese momento, estaba leyendo El guardián entre el centeno, de Salinger. El puente Williamsburg es gris y rosa, triste y llamativo, pop e industrial al mismo tiempo. Hablamos sobre formar una banda mientras cruzábamos ese puente. Queríamos crear un proyecto musical que incorporara una mezcla de estados de ánimo y sentimientos polarizados. Le propuse a Helene una lista de diferentes nombres para la banda que había anotado en mi cuaderno, y acordamos llamarla Lovataraxx. Ese fue un momento perfecto; conectamos los puntos entre deseos dispersos que teníamos al cruzar este puente.
—El nombre de la banda es una mezcla de las palabras amor y ataraxia (un estado lucido de profunda ecuanimidad caracterizado por libertad continua del sufrimiento y preocupación, según Wikipedia). ¿Tratáis de brindar paz a vuestros oyentes con vuestra música?
—Intento encontrar paz para mí mismo creando música. Esa es mi medicina. ¡Me alegraría que eso pudiera ayudar a alguien más! En un mundo perfecto, no necesitaríamos analgésicos. El atarax es utilizado para tratar la ansiedad. Puedes recluirte al estar sedado. Por el contrario, ir a un concierto es una especie de ceremonia que puede calmar tu alma.
—El dúo apareció en la compilación Oráculo dedicada a Absolute Body Control con una versión de “Automatic”. ¿Sois fans de la banda de Dirk Ivens?
—Conocía un par de canciones de ABC, especialmente “Automatic”. Supongo que la primera canción que escuché fue “Is there an exit?”. Un amigo mío la había incluido en una compilación que teníamos para los viajes. Helene solía cantar la parte de la mujer de esta canción mientras conducíamos en una gira, con una especie de voz de maullido: “¿Hay una salida?…”. Cuando Oráculo nos pidió participar en el recopilatorio, pensamos que sería una buena idea hacer una versión de “Automatic” con las voces de Helene.
—Siendo franceses, ¿os ha influido la coldwave original? Recientemente entrevistamos a Silent EM, que también tocará en Ombra y mostró un gran conocimiento del género.
—No soy un adorador acérrimo de ningún género musical. Si una canción es genial, no importa la parroquia o el peinado del cantante. Por supuesto, escucho regularmente música coldwave y minimal synth, pero no coleccionaría todas las bandas imitadoras; eso sería demasiado. Puedo cambiar fácilmente a hip hop underground, música industrial, punk hc, pop hipnagógico… Y, por supuesto, me encanta la música synth de los 80, desde Devo hasta los temas de Carpenter y cosas por el estilo.
—Vuestro primera referencia fue un split con Archet Cassé. El sonido de la banda era bastante diferente, aunque algunas de las canciones pueden hacerte pensar en lo que hicisteis después. ¿Todavía estabais buscando vuestro sonido en ese momento?
—En mi opinión, este split no es un álbum de Lovataraxx. Solo recibimos la propuesta de hacer una cinta y no sabíamos que sería un split. Como pasamos un par de días en Leipzig, decidimos grabar algunos temas en el estudio de un amigo que realmente no conocía nuestro sonido o no escuchaba ese tipo de música. Ya no escucho esos temas en absoluto; para mí son un poco toscos. ¡Me sorprende realmente cuando alguien menciona esa cinta compartida!
—En cambio, el EP Kairos suena como el primer álbum (la mayoría de las canciones se incluyeron allí) pero un poco más experimental en pistas como “Eidolon β” o “Minted Mind”. ¿Preferiste enfocarte en una dirección más orientada a las canciones?
—¡En eso estoy de acuerdo! Kairos es el primer EP real de Lovataraxx. Comenzamos a trabajar con Pierrick Monnereau, uno de mis mejores amigos. Él está realmente interesado en la música electrónica y es un gran productor. Tuvimos tiempo para probar diferentes teclados, arreglos y composiciones para construir el sonido de cada tema. Siempre intento encontrar un buen equilibrio entre sonidos experimentales y la composición clásica.
—Hablando del primer álbum, Hébéphrénie, fue lanzado originalmente por Unknown Pleasures y ahora ha sido remasterizado con un orden diferente y una nuevo tema
, “Rekon” (que ya estaba incluido el EP). ¿Con el tiempo pensasteis que este nuevo orden se adapta mejor al flujo del álbum?
—El tema “Rekon” ya estaba en la primera edición del LP Hébéphrénie. Simplemente, los títulos estaban mal en la portada de la primera edición de vinilo. “Rekon” ya cerraba el álbum en la primera versión de Hébéphrénie. Y creo que es su mejor lugar, porque esta canción es realmente onírica. Recuerdo cuando recibimos nuestros primeros ejemplares de los vinilos. Era tarde, por la noche y solo tuve tiempo para comprobar si todo sonaba bien. Puse el vinilo en el tocadiscos y me recosté en el sofá para escucharlo. Estaba realmente cansado y casi ya en mis sueños, escuchando “Rekon” y su arpegiador. Fue una experiencia maravillosa escuchar esos sonidos oníricos al final del tema y caer en la inconsciencia.
—Como habéis comentado, ambos álbumes tratan sobre la locura mental y cómo la sociedad trata de evitar sanar a las personas. ¿Qué os inspiró a elegir tal tema para vuestra música?
—Hay mucha inspiración diferente para este tema. Ambos tenemos padres que trabajan en hospitales, así que escuchamos mucho sobre cómo algunos pacientes son maltratados por falta de fondos. También visitamos un centro social autónomo en Italia donde enfermeras y voluntarios intentan ayudar a pacientes con problemas psiquiátricos. Esos pacientes fueron dejados solos después de un terremoto en la ciudad, sin cuidados reales.
También estaba leyendo varias novelas de Philip K. Dick mientras componía nuestro primer LP, y descubrí la palabra “Hébéphrénie”: un tipo de esquizofrenia que generalmente surge cuando eres un adolescente. Las personas hébéphrénicas se encierran en sí mismas y quieren vivir una vida reclusa. Se supone que debes estar en perfectas condiciones como adolescente y tener tu vida por delante. Así que ese tipo de enfermedad mental contradice el mito del joven adulto aventurero que vive la vida al máximo.
—¿Habéis leído Erewhon? Es un libro interesante sobre una sociedad donde las personas enfermas van a prisión, mientras que los “delincuentes” son tratados como enfermos.
—No, no conocía ese libro, ¡gracias por mencionarlo!
—¿Cuáles son vuestros pequeños fantasmas?
—Son todos nuestros seres queridos que fallecieron cuando estábamos componiendo Hébéphrénie y Sophomore.
—Vuestra música está influida por la mitología griega y la ciencia ficción (al menos leí eso en algunos textos promocionales). ¿Podéis contarnos más sobre esto?
—He sido profesor de latín durante años, así que realmente estoy inmerso en la mitología. Por ejemplo, Hébé es la diosa de la juventud. Por eso hay algunas referencias a la mitología griega y latina en la portada de Hébéphrénie. Un tema se llama “Araknee”, y es una referencia a Las metamorfosis de Ovidio. Y las letras tratan sobre el mito de las Tres Parcas. También hay muchas referencias a la mitología y la religión en Sophomore. Todas las letras tienen significados dobles.
—El segundo álbum es un poco más electrónico/bailable y menos coldwave. ¿Qué os llevó en esa dirección?
—Supongo que jugamos con nuevos equipos y escuchamos nueva música. Realmente no estaba planeado ni nada. Además, las canciones más electrónicas de Hébéphrénie fueron compuestas al final del proceso, y ya estábamos trabajando en un nuevo álbum.
—Julien, has hablado de tu amor por las bandas sonoras de terror originales, especialmente Carpenter, y supongo que esto se puedo percibir en temas como “Zerrissen”. ¿Te gustaría hacer una banda sonora en el futuro? Podrías usar tu Juno 60 para eso.
—¡Me encantaría hacer una banda sonora, por supuesto! Si algún cineasta está interesado, estoy disponible.
—Hay un par de canciones cantadas en alemán, una de ellas “Traumen”. ¿Por qué elegiste diferentes idiomas para el álbum?
—Las letras surgen naturalmente en un idioma u otro, ¡así que es realmente espontáneo! También tenemos canciones en español y estamos preparando canciones en francés, que hemos tenido en el horizonte durante mucho tiempo.
—También queríamos preguntaros sobre ese tema en español, titulado “Marybone”. Es una de mis canciones favoritas del disco, y me gustaría saber un poco más sobre ella.
—Esta canción está inspirada en una obra de teatro de Federico García Lorca llamada Bodas de Sangre. Tenemos un videoclip para esa canción, pero estamos esperando el momento adecuado y el buen canal para difundirlo. El título “Marybone” es una alusión a Las criadas, de Jean Genet. Las letras y la canción tratan sobre el hecho de que a veces las víctimas son convertidas en culpables por la sociedad y los medios.
—Ambos álbumes tienen un final realmente bueno, muy dramático, “Hellebore” (aunque es cierto que la edición en cassette y vinilo tiene diferentes pistas finales) y “Mare”. ¿Es algo a lo que prestáis especial atención?
—¡Por supuesto! Construimos nuestros álbumes como historias. El último tema de cada álbum es muy importante para nosotros, porque debe acompañar el silencio. Uno de mis referencias es “The Bell” de Lou Reed. Este es un final perfecto para un álbum, en mi opinión. También pensamos en la tradición de los temas ocultos en algunos álbumes. Por ejemplo, mencionaste “Eidolon”. Se suponía que sería un tema oculto al final de nuestro primer álbum. Cuando los oyentes prestan atención a la última canción de un álbum, significa que realmente están escuchando la música, así que siempre es un cumplido para mí cuando alguien hace referencia al último tema.
—Hablando de vuestros conciertos, giráis con un VJ que usa viejos televisores y un tubo de neón. ¿Ayuda a darle un toque más cinematográfico a la música?
—La parte cinematográfica… ¡esperamos que sea tarea de la persona que escuche la música! Tuvimos una reflexión sobre el escenario, sobre el significado de estar ahí y cómo construimos un vínculo con la audiencia. Imágenes y luces son un nuevo lenguaje en el escenario. Es como un instrumento que pone énfasis y nos abarca a los tres. Si no quieres verlo, no hay problema… Los videos no son una ilustración de las canciones.
—Julien, solías tocar el bajo en los conciertos, pero ahora has pasado a los sintetizadores y máquinas de ritmo, ¿por qué?
—¡Me encanta tocar el bajo, lo echo de menos! Siempre he tocado sintetizadores y cajas de ritmo durante los shows, y un par de canciones con el bajo. Es solo que, recientemente, me resultaba un poco frustrante llevar un bajo para una o dos canciones. Se tarda bastante tiempo en hacer una buena prueba de sonido con el bajo y el amplificador, para solo usarlo unos minutos durante el show. La mayoría de las veces, nos piden tocar 40 minutos y eso es todo. En esos conciertos toco muy poco el bajo. Cuando tengamos demandas especiales de sets más largos, ¡lo volveré a llevar con gusto! Por ejemplo, me encantó tocar “Marybone” con un bajo, ¡tengo que hacerlo de nuevo!
—Actualmente hay muchas bandas de darkwave/coldwave y muchas de ellas están haciendo una gran música. ¿Alguna banda que os guste especialmente?
—Hay muchas, muchas bandas que estamos escuchando, quizás más en la onda del minimal wave / electrónica últimamente: Oberst Panizza, Llora, Adult, Figure Study, Kap Bambino, Das Ding, Neon Indian…
—¿Cuáles son vuestros planes para el futuro?
—Estamos terminando un nuevo álbum, preparando conciertos en Grecia, Armenia y Georgia, planeando una gira en Australia y un par de conciertos en Sudamérica. También estamos tratando de incluir miembros adicionales de la banda para un par de conciertos. Nos encantaría volver a hacer una gira por Estados Unidos en el futuro; hemos estado allí varias veces en el pasado y nos encantaría volver a ver a nuestros amigos allí.
—¿Qué podemos esperar de vuestro concierto en el Ombra?
—Puedes esperar algo real para tu cuerpo y alma. Siempre intentamos hacerlo y nunca fingirlo. Las personas que tienen grandes expectativas recibirán un trato especial. Vengan sin anticipaciones ni preconceptos. Confiad en vuestros oídos y no sigas las tendencias, os encantará ese momento.
