Varsovie, la banda francesa de post-punk/dark rock nacida en el 2005, llega a su cuarto disco, L’ombre et la nuit, tras État Civil, L’Heure et la Trajectoire y Coups Et Blessures. Varsovie son Grégory Cathérina y Arnault Destal, autores de un post-punk de autor, de guitarras feroces, frías melodías y mucha poesía. De adelanto del disco, tuvimos el single Magnitizdat y el vídeo de “Kissa Kourprine” que comentamos en esta página y que sirvieron para que esperásemos este disco como agua de mayo. La edición en cd es en digipack y cuenta con un bonito diseño en gris y marrón.
Comienza el disco con la imponente “Sur la Nature du Vide” y las cartas sobre la mesa: guitarras penetrantes, una forma de cantar más cercana a la declamación y un alto contenido poético. Continuamos con los dos temas ya conocidos: “Magnitizdat”, una feroz pieza de post-punk y “Kissa Kouprine” suenan menos abrasivos pero igual de intensos, en un tema en el que recuerdan a la modelo de finales de los años veinte Ksenia Alexandrovna Kuprina. “Cas Contact” es otro de los temas urgentes, con un estribillo frenético. “Evelyn McHale” es un fantástico tema, con una atmósfera tremendamente evocadora sobre una suicida que saltó del Empire State Building. En “Ne plus Attendre” destaca la potencia de las guitarras y la contundencia de la batería creando una sensación de impotencia frente al muro sonoro que te avasalla. El tema que da título al disco, “L’Ombre et la Nuit” nos remite a la obra del poeta decadente suizo Francis Giauque. a que la noche del 12 de mayo de 1965 se suicidó a los 31 años, tras haber publicado solo dos obras: Parler Seul (1959) y L’Ombre et la Nuit (1962). Es uno de los temas más intensos y de lo mejor que hemos escuchado este año. En “Série Noire” Grégory canta con gran intensidad. “Spectres” es un tema corto con guitarras afiladas y la voz invitada de Yelena Mitseva. “L’offensive” crece en intensidad poco a poco, sonando como una versión oscura del Brel de “Ces gens-Là” y eso, para el que escribe, es el mayor elogio posible.
Difícilmente encontraremos una mejor colección de canciones este año como la que contiene este L’ombre et la nuit que cuenta como mínimo con ocho temas magníficos cuya perfecta ambientación nos lleva a un mundo dominado por el gris. Un disco para entrar y no querer salir.
