De la EBM de Pail al neofolk de Har Belex hay un largo camino que Manix Salazar ha transitado con pasión y convicción. Creador además del sello Caustic Records que le servido de acompañante y escaparate de su apasionante travesía. Actuará el dieciséis de marzo en Madrid con Har Belex, el proyecto que comparte con otro de los nombres importantes de la electrónica de aquí, Salva Maine. Estarán, por fin, presentando su segundo disco, Campo de urnas, publicado en el 2022 y una de las mejores obras de neofolk que hemos escuchado en mucho tiempo.
—Hola Manix, quisiera empezar la entrevista retrocediendo a tu pasado musical más lejano. ¿Fue Vitu’s Dance tu primera banda o antes ya habías hechos tus pinitos en el mundo de la música?
—Formamos Vitu’s Dance en el año 1989 de las cenizas de un grupo anterior que se llamaba Witchboard, que fue mi primer grupo. Hacíamos Trash – Speed Metal, no grabamos nada y dimos tres conciertos, corría el año 1987 y yo tenía 16 años.
—Aprovechando que has reeditado en vinilo la demo de Vitu’s Dance, ¿qué nos puedes contar de esos tiempos?
—Pues, además de convulsos y acelerados, fueron tiempos muy guapos de los que guardo un recuerdo increíble. Editamos una demo, un Split 12” con la banda mítica H.H.H. y un 7 pulgadas, dimos unos 60 conciertos por toda la península, conocí a gente increíble y los miembros de la banda siguen siendo hoy unos de mis mejores amigos y a los que aprecio muchísimo.
Todo esto ocurrió entre los años 89 y 94, es decir en el periodo de mi vida de lo 18 a los 23 años, así que imagínate. Además, en esta etapa conocí y me empapé de todo lo relacionado con la cultura del DIY (Do it yopurself), forma de hacer que he mantenido hasta el día de hoy con el sello Caustic Records, así como con todos mis proyectos relacionados con la música.
En el año 1990 grabamos y publicamos la maqueta Mentes uniformemente aceleradas de la que rápidamente se vendieron todas las copias, obteniendo gran repercusión en la escena underground , lo que nos permitió tocar en multitud de lugares. Al poco de editar la maqueta el sello Momentos Trashicos (división de Semaphore) edita un álbum (vinilo 12”) titulado Smash hits from hell con, además de los Vitu’s, otras cinco bandas (Spontaneus Combustion, El Kaso Urkijo, Total Death, Maelstrom y Scum).
En el verano de 1991 Vitu’s Dance entramos a grabar al estudio los 11 temas que formaron el álbum compartido con la veterana banda catalana HHH y titulado Homo Homini Lupus. Este trabajo fue editado a principios de 1992 por el sello madrileño “Fobia – Duros sentimientos”
En el año 1994 se editó el single “Gérmenes” y al poco de editarlo nos disolvimos como banda.
Es gratamente sorprendente que después de más de treinta años, a día de hoy, haya gente interesada en la banda, que se haya reeditado el Split en el año 2014 y la demo en el 2023.
Además, los Vitu’s nos volvimos a juntar el año pasado para grabar una versión de los míticos Subterranean Kids, canción que ha aparecido en un vinilo tributo a la banda editado recientemente.
—¿Qué nos cuentas de tus años entre Vitu’s Dance y la creación de Pail? ¿Cómo te interesaste por la electrónica?
—El proceso entre la disolución de Vitu’s Dance y la creación de mi proyecto de EBM PAIL fue de los más natural. En los Vitu’s Dance ya componía las canciones ayudado por cajas de ritmos. En estos días empecé a hacer canciones, más bien bocetos, con las cajas de ritmos y surgió un interés y una curiosidad enorme por todo lo relacionado con este tipo de equipos, que hasta entonces sólo los había utilizado como herramienta de apoyo pero no de una forma creativa.
Durante esta época empecé a descubrir y escuchar a bandas como FLA, Skinny Puppy, Pigface, Revolting Cocks, Ministry, Pop Will Eat Itself, NIN, así como los nuevos proyectos de electrónica/industrial que provenían del sello Earache (Godflesh, Misery Loves Co., Scorn, Ultraviolence, etc.) … Y entonces todo encajó…. Podía reunir en un proyecto propio, sin depender de más músicos, mi afición por los sintes, samplers, etc.. mi gusto por las guitarras potentes, y todo ello orientado a un nuevo estilo de música que en aquellos momentos era novedoso para mí, realmente interesante y excitante y que me abría un montón de posibilidades musicales y de producción. En este momento nace Pail, corría el año 1995.
—Llegamos a Epìdemic, tu primer disco como Pail. Ahí mezclas EBM/industrial con elementos más techno. ¿Cómo veías a tu nuevo proyecto, qué dirección querías darle?
—Desde el año 1995 hasta el 1998, año en que edito mi primer disco de Pail Epidemic, no hago más que empaparme de los distintos géneros de la música electrónica que en ese momento me gustaban. Principalmente EBM, ELECTRO DARK, INDUSTRIAL, y FUTURE POP, así como de bandas que se alejaban de estos estilos como Underword, The Prodigy, Autechre, Orbital, Portishead, etc… Dentro del amplio abanico del EBM desde un inicio me sentí especialmente atraído por la rama canadiense y americana con una predilección absoluta por Front Line Assembly, Skinny Puppy, Numb, Mentallo & The Fixer, etc… así como por la EBM europea realizada en los últimos ochenta y toda la década de los noventa. Es en esta década cuando, según mi opinión, se produjeron los mejores discos del género difícilmente superables hoy día. Algunos nombres importantes y que tuvieron influencia en mi música con PAIL, además de los antes citados, son Leather Strip, Wumpscut, Nitzer Ebb, Individual Totem, X-Marks The Pedwalk, Haujobb, etc…
—Para bautizar tu sello, te fijaste en el Caustic Grip de FLA, banda que, como dices, era de tus favoritas. ¿Qué ha supuesto esta mítica formación para ti?
—Tanto Front Line Assembly como Skinny Puppy han sido y siguen siendo mis dos bandas preferidas del género. Mira que han pasado años desde sus mejores trabajos de finales de los ochenta y principios de los noventa (Caustic Grip, Too Dark Park, Taxctical Neural Implant, Millennium, Hard Wired, Bites, Rabies, Process…) y tengo la sensación qué a fecha que nos ocupa no hay banda que haya editado trabajos del nivel artístico de estos discos.
Y sí, como dices, para el nombre del sello me inspiré en el magnífico trabajo Caustic Grip de FLA.
—¿Qué te llevó a crear Caustic Records? Dijiste en una entrevista que no era fácil encontrar un sello que publicase tu material.
—Tal cual, formo Caustic Records en 1998, momento en el que tengo terminado el álbum debut de PAIL y me encuentro con que no hay ni un solo sello en todo el país dedicado-especializado en este tipo de sonidos. Es este el momento en el que doy el paso y creo Caustic Records.
La idea inicial del sello era la de servir de plataforma para la edición y distribución de mis propios trabajos, pero poco a poco fui recibiendo maquetas y comunicaciones de mucha gente interesada en fichar con Caustic y además, gratamente sorprendidos por esta nueva iniciativa, lo que me hizo empezar a fichar y a editar a otras bandas y proyectos.
También es cierto, que desde que empecé con esto de la música, siempre quise tener un sello discográfico. Siempre me ha llamado la atención todo lo relacionado con la “Industria” musical.. grupos, instrumentos, estudios de grabación, sellos, revistas, conciertos, promoción, etc. Creo que a día de hoy, y a mi nivel, he participado en cada una de las actividades que forman esta industria. A fecha que nos ocupa ya son 43 referencias las que tengo en el sello Caustic Records.
—Nos gustaría que nos hablases un poco de algunos referencias /artistas que han grabado para el sello:
Publicaste los dos discos de Tannhauser (bueno, un split y un disco). ¿Qué te pareció A New Biostate? ¿Crees que deberían haber llegado más lejos?
—Por supuesto que podían y deberían haber llegado más lejos. Tengo un especial cariño a Tannhauser ya que fue la primera banda que me escribió al sello cuando lo monté y la segunda banda que edité en el sello.
Tannhauser tenía una personalidad propia, inconfundible. A día de hoy me escucho el Split o el Biostate y me siguen pareciendo igual de buenos que entonces. Grandísima banda.
No podría exponer aquí, en este reducido espacio, todo lo relacionado con las bandas que he fichado. Solo puedo decir que cada álbum que he editado con el sello me ha flipado. Es el único criterio que he seguido con el sello a la hora de editar, que me guste. Luego el público ha sido de mi mismo criterio y el disco ha funcionado, o no, pero eso ya son temas que no están en las manos del músico ni del sello.
A día de hoy muchos de los artistas que he fichado siguen siendo amigos, otros grandes amigos, así que me siento muy orgulloso de lo que vengo haciendo con el sello. A pesar de la situación musical actual, seguiré editando cosas con Caustic, dentro de mis posibilidades.
—Tras unos primeros discos enfocados a la electrónica, publicas el recopilatorio My Dear Freaks y el primer disco de Narsilion. ¿Ya escuchabas Neofolk en esa época? ¿Siempre tuviste en mente hacer un sello que pudiera acoger cosas tan distintas?
—Pues no, sinceramente, en ningún momento tuve la intención de editar estilos más allá de la electrónica. Hasta el año 2002 – 2003 no era un gran fan de la música folk y el resto de variantes (neoclásico, ambient, etc.), escuchaba a un puñado de bandas pero no suscitaban en mi un especial interés.
Sería por el año 2002 cuando, a través de mi gran amigo Jorge Rara Avis, en las visitas a su tienda (entonces en Vitoria), empecé a descubrir a las bandas del sello Eis und Licht, que fueron las que me despertaron el interés por estos estilo. Simultáneamente, llegó a mis manos la primera demo de Narsilion que, literalmente, me voló la cabeza. Todo esto me llevó a editar la recopilación My dear Freaks en colaboración con José Socorro de La Defunción, quien tuvo la idea de la recopilación y realizó la selección de bandas.
El paso siguiente fue ponerme en contacto con Narsilion y ofrecerles un contrato de dos discos…
—Otro disco interesante es el de Trajedesaliva con Chaos Condensed. Los primeros, a los que seguimos, publicaron el año pasado un fantástico trabajo con Maud the Moth. ¿Cómo surgió Ciertos animales de costumbres discretas?
—Este álbum surgió a partir de la participación de ambas bandas en la recopilación My Dear Freaks.
Trajedesaliva es un proyecto que me encanta y la canción de la recopilación de Chaos Condensed llamó mi atención, así que una cosa llevó a la otra.
Decidimos editar en un Split las nuevas canciones de ambas bandas en ese momento y además, propusimos una canción colaborativa entre ellos.
Este disco también estuvo coproducido por José Socorro de La Defunción, gran amigo desde los primeros días del sello hasta hoy día.
—Publicaste dos discos de HIV+ (un artista y dueño de sello que seguimos en el Garaje), además del recopilatorio Electronic Manifesto. En esa época, comentaste que fue él quien te contactó ya que los el primero de los discos estaba en la onda del sello. ¿Has estado siguiendo sus últimas producciones, como el Teatre of Cruelty? Comentaste que Electronic Manifesto llevó mucho trabajo y esfuerzo, ¿verdad?
—Si, en aquella época, Pedro se puso en contacto conmigo para ver si estaba interesado en la edición, de lo que por entonces era su próximo trabajo con HIV+ Overdose Kill me. Este trabajo contaba con menos carga ruidista y con detalles y estructuras más EBM old school y Pedro creyó que Caustic era un buen sello para editarlo. En este momento Pedro todavía no había creado su sello UPR.
Al poco tiempo de la edición de este álbum Pedro me planteó la idea del Electronic Manifesto y empezamos a trabajar en el proyecto. El concepto del álbum era el de reivindicar una forma de hacer música electrónica en donde el trabajo con los instrumentos musicales, la experimentación con los mismos y la creatividad marcó un camino alejado del que en esa época (año 2007) estábamos viviendo con una homogeneización de la música liderada por el Harsh Hellektro monónoto y los nuevos softwares de creación musical que llevaban hacia la estandarización de los sonidos.
El texto promocional que hicimos definía el criterio de esta recopilación perfectamente: Con “Electronic Manifesto” hemos intentado recuperar el espíritu de la revolución Electro-Industrial forjada a finales de los 80 y en la década de los 90, en donde la creatividad, la interacción entre el artista y las máquinas analógicas y digitales de creación musical así como la complejidad y el esfuerzo requerido para la producción alcanzaron su grado máximo.
Como respuesta al electro dominante en la actualidad, sin capacidad de sorprender, que nos bombardea con los mismos ritmos, los mismos presets de los mismos sintetizadores y una temática, por lo general, sin sustancia, lanzamos a gritos este manifiesto que esperamos sea escuchado.
La edición de este doble recopilatorio conllevó un trabajo enorme. Fueron muchas semanas de escuchar y seleccionar temas en donde, lo más duro era ver como temas o bandas geniales se quedaban fuera por falta de espacio o por concepto.
Posteriormente al Electronic Manifesto coproducimos entre Cautic Records y el sello francés Divine Comedy el nuevo trabajo de HIV+ We are all haunted houses.
Con respecto a UPR, suelo interesarme por las noticias del sello y sus ediciones pero, por falta de tiempo principalmente, es imposible llegar a conocer a todos los sellos y todas las bandas del panorama hoy día.
Me alegro de que Pedro siga activo con sus múltiples proyectos. Pudimos conocernos en Madrid hace ya años, en un concierto que organizamos con HIV+ y me pareció un gran tipo.
—También dos trabajos importantes dentro del mundo de la EBM estatal fueron los de Mekanik Disorder. ¿Qué nos cuentas de estos dos discos?
—Al igual que con el resto de referencias, cuando me llegó la música de Mekanik Disorder me gustó desde la primera escucha. El resto está ahí, dos discos editados en el sello.
El primero de los trabajos Out of context sigue sonando en las sesiones de Djs de la escena.
Creo que la banda no sigue en activo.
—Publicaste los dos primeros discos de Der Blaue Reiter, otra banda que nos gusta. ¿Qué nos cuentas de ella? Has publicado varios proyectos de Sathorys Elenorth y Núria Luis, como Narsilion o el split con Fragile.
—Con Sergi tengo una relación de amistad forjada desde hace mucho tiempo. Me parece un músico excelente y muy versátil y prácticamente todo lo que hace con sus distintos proyectos me encanta.
Además de los dos primeros trabajos de Narsilion, edité los dos primeros discos de Der Blaue Reiter. Todos estos discos editados en Caustic Records se han convertido con el paso del tiempo en clásicos de sus distintos estilos y, o bien están siendo reeditados o lo serán en un futuro.
Recientemente edité en el sello una caja limitada de coleccionista con los tres primeros trabajos más material extra de DBR y la última referencia del sello a día de hoy es la reedición del primer álbum de Narsilion Nerbeleth en formato doble vinilo y con dos temas inéditos extra. La edición está limitada a 300 copias y se está vendiendo muy bien, así que el que quiera el disco que se dé prisa.
Fragile es otro de los proyectos de Sergi, éste más orientado al Dark Folk/Neo Folk. Tanto a Sergi como a mí nos pareció una idea genial el hacer un Split con el material de Fragile y con las primeras canciones de Har Belex que servía de presentación de ambas bandas. Este vinilo también está a punto de agotarse.
—En el 2010 además empieza a publicar material de Culture Kultür. ¿Como surge esto? ¿Te gustaban sus primeros discos más EBM? Supongo que es a partir de aquí que te pones en contacto con Salva Maine.
—Mi primer contacto con CK fue en el año 1999 cuando me hicieron llegar al sello su último disco (BUMP!) autoeditado en su sello Microscopic. Ese mismo año, en la segunda referencia de Caustic Records, la recopilación Re-activated, incluí el tema “Obsessed” de CK. En aquel entonces Salva todavía no había entrado a formar parte de CK y la banda todavía no había fichado por el sello alemán Out Of Line.
En el año 2003, con Salva ya en la banda, incluí una versión exclusiva de su canción “The Analyst” en la recopilación del sello Againts. Fue en esta época cuando conocí a Salva por primera vez en un viaje a Andalucía. Desde el primer momento hubo química entre nosotros y desde entonces somos grandes amigos, pero en aquel entonces nunca hubiésemos pensado que en un futuro tendríamos un proyecto en común, ¡¡¡y menos que ese proyecto iba a ser de Dark Folk!!!.
Posteriormente, y a partir del año 2010, CK decide abandonar el sello alemán Out of Line y ficha con Caustic Records. Hasta la fecha he editado sus dos últimos trabajos y estamos preparando una sorpresa con la banda para finales de este año 2024 o principios del 2025.
—Pasemos a Pail de nuevo. En el bonito libreto de Towards Nowhere, podemos encontrar las letras de los temas y su traducción al castellano. Supongo que querías llegar a más gente con esto. La mayoría de las letras tienen mucha miga, como “Today the wind blows from the north” o “What they call Paradise”. ¿Crees en el valor de la música para hacer pensar a la gente?
—Sí que creo en la capacidad de la música para hacer reflexionar a la gente, si bien esa no es mi intención principal. Las letras de Pail están muy trabajadas. El escribir letras es un trabajo que me cuesta mucho, le doy mil vueltas a cada tema. Mi única intención con los textos es que sean consecuentes con mi forma de ver las cosas y que se acoplen a la música de cada canción lo mejor posible. Todas mis letras exponen asuntos sociales, religiosos, incluso políticos, pero mi intención es alejarme completamente del adoctrinamiento que otras bandas exponen con su música. Solo me interesa hacer buenas letras y ser consecuente, si eso propicia una reflexión o interés en ciertas personas pues más que mejor.
—Faith in the void fue tu tercer largo (al que hay que sumar el 12” Bei finsterden tagesanbruch) ¿Cómo piensas que evolucionó el proyecto desde el primer disco a este?
—Creo que, excepto el maxi Bei Finsterdem…” que se hizo con el criterio de que fuera un producto para pinchar por Djs, y que se aleja un poco del estilo de Pail, el resto de los tres discos de Pail tienen una estructura de estilo muy similar. Los tres álbumes son trabajos de EBM en líneas generales, si bien se complementan con otros estilos, que en cada uno de los discos son distintos dadas las fechas en las que se editaron: 1998, 2005 y 2011. Además de la EBM, en Epidemic hay influencias del Break beat y del rock industrial. En Towards Nowhere hay influencias del electro dark europeo de nueva hornada en los 2000 y Faith in the void se puede decir que es el álbum más puramente EBM que he hecho.
—Leí en una entrevista que Har Belex surgió de una visita tuya al pueblo de Salva. ¿Cómo surgió todo?
—No exactamente pero casi… Sobre el año 2013, yo tengo varias líneas de guitarra acústica escritas sin ninguna finalidad en concreto. Siempre que toco algún instrumento y me parece que algo merece la pena lo grabo. Normalmente me junto con multitud de este tipo de bocetos.
En una de mis visitas a Andalucía, estando con Salva echando unas cervezas, cojo la acústica, me pongo a tocar una de esas líneas y le digo a Salva que improvise algo a la voz. El resultado inmediato fue acojonante, Aquello me sonó a música celestial.. ja, ja, ja.
Se puede decir que ese momento fue el nacimiento de Har Belex, ese momento en el que los dos vimos que podían salir cosas chulas de una colaboración.
—Y eso os llevó a grabar Chandelle, ¿no?
—Chandelle es nuestro álbum largo de debut, si bien anteriormente ya habíamos editado el Split con Fragile. Después de trabajar un tiempo en las canciones y de invertir nuestro esfuerzo e ilusión en ellas el paso lógico fue grabarlas y editar este trabajo Chandelle.
En un principio Har Belex solo iba a ser un proyecto de estudio, nuestra intención no era tocar en directo. No obstante, el trabajo tuvo tan buena acogida (principalmente en Alemania) que decidimos presentar las canciones en directo.
—He observado que te gusta mucho ir de rutas. ¿Cómo te sirte la naturaleza de inspiración?
—La naturaleza, y todo lo que ella nos aporta, tanto a Salva coma mí, es parte fundamental de Har Belex. Sinceramente creo que de no tener esta conexión con la naturaleza Har Belex no habría existido.
Si, me encanta salir al monte, tanto andando como en bici. Salgo prácticamente todos los días por mi zona, me relaja muchísimo y es el momento del día en que filtro todo el estrés y cansancio del día a día. Vuelvo a casa como nuevo.
Además, cuando puedo aprovecho para hacer rutas montañeras más largas y exigentes en otras zonas de España.
—Con Har Belex habéis tocado bastante fuera de España y acabas de comentar que tuvisteis gran éxito en Alemania. ¿Veis una mayor predisposición en el extranjero a vuestra música?
—Sin ninguna duda…. hemos tocado en Alemania (creo que cinco veces hasta ahora), Portugal, Países bajos y Bélgica. Cada concierto fuera ha sido una pasada y a día de hoy, en lo que al directo corresponde, estamos más enfocados en tocar fuera de aquí. Las pocas veces que hemos tocado aquí, salvo alguna excepción, hemos estado implicados directamente en el concierto, es decir, hemos tenido que coorganizarlo para que se llevase a cabo. En otras ocasiones, lo que se nos ha propuesto no llegaba ni para cubrir nuestros gastos de desplazamiento y alojamiento de la banda.
Este aspecto va en la misma línea que las ventas, tanto las ventas a través del sello como las del merchandising en nuestros conciertos del extranjero son muchísimo mayores que lo vendido aquí. Sinceramente, mejor no compararnos con otros países en este aspecto, salimos perdiendo por goleada… por desgracia…..
—Para vuestro segundo disco Campo De Urnas os habéis inspirado en los ritos funerales de un periodo de la edad de bronce. Decías que asociabas esta época con lo que el mundo actual se estaba convirtiendo, una necrópolis moral, religiosa y social. ¿Nos puedes explicar un poco más esto?
Si, esa es la idea que aborda tanto el título como el artwork del álbum.
Los Campos de Urnas eran necrópolis, tumbas de incineración…. enterramientos en urnas de las cenizas, semienterradas bajo montículos o sobre losas de piedra, o en el centro de estructuras como los crómlech.
Asociamos estos “Campos de Urnas” con:
- Necrópolis social, religioso, moral y económico en los campos en general = países
- Devastación de los ecosistemas, naturaleza
- Campos de batalla en las guerras
- Mitología, arquitectura megalítica
- La muerte
Todas las canciones de este álbum están asociadas con alguno, o varios temas de los expuestos.
—Ya que provienes de la electrónica y que dices que compones todo con sintetizadores. ¿Cuánto crees que os diferencia eso de otras bandas del género?
—Realmente en Har Belex no compongo todo con sintetizadores. Las líneas principales de cada canción están compuestas con guitarra acústica o clásica, según los casos. Gran parte de la percusiones son compuestas y tocadas con batería o elementos de una batería real aquí en mi estudio. Todos los samplers utilizados en las canciones (cantos de pájaros, campanas, tormentas, ríos…) son grabaciones de campo que he realizado aquí en mi zona.
Solo las pistas de arreglos de sonidos sintetizados/electrónicos, algunas percusiones y las líneas de violín y chelo están producidas con sintetizadores. Si bien, en lo que al violín y chelo se refiere, posteriormente se graban para el disco por músicos profesionales.
En otro orden de cosas, no creo que gran parte de bandas de este género tengan formas de componer muy distintas a las nuestras, quien más o quien menos en estas bandas ha tenido relación con la música electrónica/experimental, con el rock gótico, el postpunk, etc. y están familiarizados con esta forma de crear música, así como con el manejo de sintetizadores, cajas de ritmos, samplers, etc..
—Volviendo a Caustic Records, dentro de poco hacen 25 años del sello. ¿Cómo ves que ha cambiado el panorama para un sello como el tuyo en estas dos décadas y media?
—El panorama es totalmente distinto. El cambio de paradigma en la industria musical es total.
Cuando empecé con el sello todavía era la época en la que la tirada mínima en las fábricas era de 1000 Cds y normalmente se fabricaba esta cantidad o más (1.500, 2.000 Uds.). Un porcentaje importante de las copias se dedicaban a promoción y se enviaban físicamente a revistas, periódicos, radios, promotores, etc. Existían muchos canales de distribución al por mayor y muchas tiendas. Evidentemente, todo lo que se vendía era en físico.
Hoy día la situación es totalmente distinta. Las tiradas se han reducido mucho, lo habitual es no fabricar más de 300 copias y en casos excepcionales 500. La promoción de envíos físicos ha desaparecido casi completamente y se hace a través de enlaces de los discos en digital. En la actualidad, prácticamente todos los distribuidores de material al por mayor han desaparecido y los que siguen trabajando no les compensa distribuir discos que no se vendan mucho. Con respecto a las tiendas, pasa lo mismo, han ido desapareciendo y las que aguantan es gracias a esta segunda juventud del vinilo que estamos viviendo… y ojalá se mantengan muchos más años.
No obstante, esta nueva situación tiene su lado positivo y es que poco a poco la gente se va concienciando de que la música en digital también tiene un valor y, al igual que los discos físicos, se debe pagar por ella, así que las ventas digitales (escasas) que tenemos los sellos ayudan algo a compensar el descenso de ventas brutal del material físico. Adaptarse o morir, no queda otra.
—Ya que hablabas antes de él, me gustaría preguntarte por otro vitoriano que es muy amigo tuyo, Jorge Larreina de Rara Avis. Habéis colaborado en múltiple ocasiones. ¿Cómo os conocisteis?
—Jorge es un amigo con mayúsculas. Además, hemos sido socios en RARA AVIS, hemos colaborado con ediciones de discos mediante el sello conjunto Horror Business, hemos editado una revista juntos (Transmisión), hemos organizado conciertos, etc.
A Jorge le conocí en Vitoria, cuando montó Rara Avis. Hasta ese momento nunca habíamos coincidido.
En cuanto me enteré de que se había abierto una tienda nueva en Vitoria me acerqué a bichear discos, y cuando comprobé que en parte de los estantes había discos de FLA, Skinny Puppy y otras bandas de EBM, rock industrial, etc. no quedó otra que iniciar una conversación con ese dicharachero vendedor de discos. Recuerdo, cuando le dije que yo era el de Caustic Records y el de PAIL, la cara de sorpresa y de incredulidad de Jorge, ya que ese primer día pasé por la tienda en mis horas de trabajo y yo iba con indumentaria de persona formal y elegante!!!! Ja, ja, ja…. Jorge es un gran tipo, trabajador, luchador y emprendedor.
—Una de tus últimas aventuras ha sido la creación de Grabaciones Viscerales, un nuevo sello para reeditar hardcore. ¿Qué nos cuentas de esto?
—Bueno…. Desde aquellos finales de ochenta, principios de los noventa nunca he dejado de escuchar Hard Core, ni de asistir a conciertos, ni de interesarme por esta escena. Sigo manteniendo y ampliando mi colección de discos de estos estilos. Siempre he querido trasladar lo que vengo haciendo con Caustic Records a mi otra pasión, el Hard Core, pero nunca encontraba el momento, principalmente por falta de tiempo.
El año pasado se puso en contacto conmigo un sello que quería re-editar la maqueta de Vitu’s Dance en formato vinilo y me pareció el momento perfecto para crear el sello Grabaciones Viscerales y coproducir el disco.
A fecha que nos ocupa, acabo de editar la segunda referencia (un vinilo tributo a Subterranean Kids), está de camino desde fábrica la tercera y ya tengo prevista la cuarta referencia.
—¿Qué planes tienes para el futuro? ¿Piensas recuperar a Pail?
—Mi intención es seguir con Caustic Records y potenciar todo lo que pueda Grabaciones Viscerales. Además, musicalmente, Har Belex es de momento mi prioridad.
En cuanto a PAIL, me gustaría retomar en algún momento el proyecto, tengo varios bocetos de canciones que de vez en cuando produzco, pero no sé si voy a encontrar en breve ese punto de inflexión que me lleve a terminar esas canciones y editar algo nuevo… veremos.
—Vas a actuar en Madrid con Har Belex el dieciséis de marzo. ¿Qué podemos esperar de vuestro concierto?
—Va a ser un concierto íntimo en una sala pequeña y solo vamos a tocar nosotros. En el concierto tocaremos temas de nuestro primer disco, así como del nuevo trabajo Campo de Urnas. Los conciertos de presentación de este nuevo trabajo son menos percusivos que los que dimos anteriormente, son más acústicos. Sobre las tablas estaremos Salva, Lucas, nuestro violinista tanto en directo como en estudio y yo. Esperamos ver a muchos de nuestros amigos de Madrid allí.