Dan Shea, uno de los miembros de los tristemente desaparecidos Vukovar publicó el siete de octubre (justo el día de mi cumpleaños) del año pasado un nuevo disco, titulado Snowcrush, casi como su actual proyecto. Antes ya había entregado en el 2021 doce canciones bajo el nombre de A Frightened Man además de haber creado el proyecto Neurotic Wreck con el que grabó un álbum. Snowcrush el trabajo que nos ocupa hoy, continúa por un lado el luto por la muerte de Simon Morris, que si recordáis era el eje central de los últimos discos de Vukovar y por otra intenta sobrellevar el haber sufrido un asalto sexual.
Snowcrush es un disco extremadamente lo-fi en el que podemos imaginar a Dan Shea encerrado en su habitación y grabándolo de una tirada, sin preocuparse por errores y buscando solo la honestidad más inmediata.
La banda con la que conocimos a Dan fue siempre una caja de sorpresas, y este disco no deja de serlo. Snowcrush empieza con la intro “Wisdom” con un comienzo solemne que acaba mutando en electrónica malsana. A continuación llega la rabia de “Poz Top”, una especie de noise rock muy lo-fi. En “Cowardice”, encontramos a Dan solo a la guitarra con un rollo más folk confesional, hasta que la guitarra estalla con violencia, sin miedo al feedback, y buscando la honestidad de la primera toma. “The Mirror Jury” suena un poco más a Vukovar al menos en la voz. Nunca llegamos a saber bien cómo se dividían las funciones la peculiar banda, pero con este trabajo de Dan Shea logramos hacernos una idea de su aportación. “My Darkest Star” sí podría entrar en un disco de su anterior banda, ya que contiene esa especie de melancolía post industrial que pudimos disfrutar en el pasado, y es de lo más destacado del álbum. “Blood Lust” de alguna manera me recuerda al “The Gift” de The Velvet Undergrouind ya que Dan recita sobre un fondo de distorsión. El álbum continúa con un delicado interludio llamado “Shattered”. En cambio, ncontramos más guitarras duras y distorsión en “Build My gallows High” con Dan haciendo una segunda voz inquietante. “Angel Key” es otro interludio, esta vez a base de ruidos y terminamos con “Professional Anhedoniac”. Esta composición, que aborda el tema del suicidio, comienza con la guitarra y los ruiditos tapando la voz aunque va mutando para convertirse en un tema algo más convencional antes de acabar de nuevo de la forma más ruidosa posible.
